Israel ha notificado a sus familias la identidad de 97 secuestrados por el movimiento terrorista Hamas en la Franja de Gaza, confirmó este jueves el portavoz del Ejército, Daniel Hagari.
Hamas y la Yihad Islámica aseguran tener unos 130 rehenes entre ambos grupos, aunque algunas estimaciones israelíes elevan la cifra a unos 200.
Hagari también informó que han sido notificadas las familias de 222 soldados muertos en combate desde que empezó el sábado la guerra contra los terroristas palestinos de Gaza, aunque la cifra de uniformados fallecidos se estima mucho mayor entre los más de 1.300 israelíes muertos.
“Queridas familias, incluso durante los combates, estamos haciendo tres esfuerzos principales: el esfuerzo operativo de inteligencia, por formular un diagnóstico de la situación de los cautivos y desaparecidos, y por ayudar a sus familias”, afirmó hoy en un comunicado el general de brigada Gal Hirsch, nombrado por el gobierno Coordinador para cautivos y desaparecidos.
El coordinador indicó que las búsquedas sobre el terreno continúan, así como el difícil trabajo de la identificación de los cadáveres.
“Muchos de los heridos están siendo tratados en el hospital y estamos investigando cada dato que pueda ayudarnos a localizar a los desaparecidos”, señaló.
Hirsch habló anoche con el enviado presidencial de EEUU para el asunto de los rehenes, Roger Carstens, y hoy se reunirá con su adjunto, Steven Gillen, que llega a Israel para abordar el tema.
“Los cálidos lazos, la sincera preocupación y el compromiso estadounidense de ayudar en todo lo posible son muy importantes para nosotros”, señaló Hirsch.
La cámara de un auto muestra a terroristas de Hamás disparando a los asistentes a la fiesta electronica y tomando rehenes
“Mi personal y yo trabajamos las 24 horas del día para los desaparecidos, los cautivos y sus familias. Juntos venceremos y venceremos”, agregó.
Hamas lanzó el sábado un ataque por sorpresa por tierra, mar y aire, que tomo desprevenido a Israel, que declaró la guerra a Hamas y desde entonces se suceden enfrentamientos armados en una veintena de puntos en territorio israelí.
Esta nueva guerra ha causado al menos 1.300 muertos en Israel y más de 3.200 heridos.
