La censura china trabajaba intensamente el lunes para suprimir cualquier información sobre las protestas que estallaron el fin de semana en varias ciudades en demanda de libertades políticas y el fin de los confinamientos por el covid-19.
En las redes sociales ya no quedaban noticias sobre las manifestaciones. En la plataforma Weibo, una red social china similar a Twitter, las búsquedas de “Río Liangma” y “Calle Urumqi”, lugares de las protestas en Pekín y Shanghái, fueron desligadas de cualquier referencia a las protestas.
Multitudes tomaron el domingo las calles en toda China, en una ola de protestas como no se ha visto desde las movilizaciones prodemocracia de 1989.
Pero toda información sobre estas manifestaciones fue eliminada de redes sociales.
Videos como los de estudiantes universitarios cantando en protesta y las manifestaciones en otras ciudades desaparecieron de la plataforma WeChat y fueron sustituidas por avisos de que “incumple” las reglas o que es “contenido sensible”.
La búsqueda en Weibo de “#A4″, una referencia al papel en blanco levantado como protesta simbólica contra la censura, también pareció haber sido manipulada para mostrar una serie de mensajes de días previos.
Dos personas fueron detenidas el lunes en un sitio de Shanghái donde se realizaron las protestas del fin de semana, observó un periodista de AFP. Consultado por el motivo del arresto, un policía dijo a AFP que fue “porque no obedeció nuestras disposiciones”, y refirió al periodista a la policía local. Los agentes también ordenaron a las personas borrar las fotos de la manifestación de sus teléfonos móviles.
Un mortal incendio la semana pasada en Urumqi, capital de la región noroccidental de Xinjiang, catalizó el enojo público al considerar que los confinamientos sanitarios complicaron el rescate de las víctimas.
Las manifestaciones también reclamaron más libertad política, con algunas personas que pidieron la renuncia del presidente chino, Xi Jinping, recién nombrado para un histórico tercer mandato. En la capital Pekín y en Shanghái se dieron grandes congregaciones, incluidos choques con la policía que intentó impedirles llegar a la calle Wulumqi de Shanghái, cuyo nombre es la palabra Urumqi en mandarín.
En la noche del sábado, algunos grupos que coreaban “¡Xi Jinping, renuncia! ¡PCC (Partido Comunista Chino) renuncia!”, fueron dispersados la mañana del domingo.
Pero por la tarde, centenares de personas se aglomeraron en la misma zona con hojas de papel en blanco y flores en lo que pareció ser una protesta silenciosa, dijo un testigo a AFP.
En Pekín, al menos 400 personas se reunieron a orillas de un río durante varias horas, algunas de las cuales gritaban “¡Todos somos de Xinjiang! ¡Vamos pueblo chino!”. Periodistas de AFP en el sitio dijeron que la multitud cantó el himno nacional y escuchó discursos, mientras al otro lado del río aguardaba una fila de autos policiales.
Un periodista de AFP en Shanghái vio el lunes una fuerte presencia policial, con barreras azules instaladas en la calzada para impedir nuevas congregaciones.
“Punto de ebullición”
El estricto control informativo chino y las restricciones de viaje ligadas a la política de cero covid dificultan verificar cuántas personas se manifestaron a lo largo del inmenso país.
Pero manifestaciones tan extendidas son excepcionalmente raras en China, donde las autoridades reprimen cualquier muestra de oposición al gobierno central.
El domingo también se dieron protestas en Wuhan, la ciudad central donde primero se detectó el covid-19, y se reportaron manifestaciones en Cantón, Chengdú y Hong Kong.
Convocadas por redes sociales, las protestas han sido motivadas por la frustración con la política gubernamental de cero covid, que incluye confinamientos, extensas cuarentenas y campañas masivas de pruebas para erradicar hasta el mínimo foco de contagio.
El estatal Diario del Pueblo publicó el lunes un comentario que advirtió sobre una “parálisis” y el “agotamiento” por la lucha contra el covid, sin llegar a pedir el fin de las medidas rígidas.
“La gente llegó a un punto de ebullición porque no hay una dirección clara para terminar con la política de cero covid”, comentó a AFP Alfred Wu Muluan, experto en política china en la Universidad Nacional de Singapur.
“El partido subestimó el enojo popular”, agregó.
La situación golpeó las bolsas asiáticas, que abrieron el lunes con fuertes bajas.
China reportó el lunes 40.052 contagios de covid-19, un récord en el país de 1.400 millones de habitantes.