El dueño de Twitter, Elon Musk, anunció el miércoles que “otra persona” podría tomar de aquí a finales de 2023 las riendas de la red social que, bajo su dirección, ha pasado por “montañas rusas”, entre polémicas y problemas técnicos.
“Me imagino que probablemente hacia el final de este año, será el buen momento para encontrar otra persona para dirigir la empresa”, declaró por videoconferencia en un foro de Dubái, en Emiratos Árabes Unidos.
“Tengo que estabilizar la organización, asegurarme que está en un situación sana y que la hoja de ruta está claramente definida”, añadió. En su opinión, Twitter tendría que estar “en una situación estable hacia finales de este año”.
La gestión de Musk, quien pagó unos 44.000 millones de dólares por la red social en octubre de 2022, ha generado múltiples polémicas entre los usuarios. “Ha sido una montaña rusa”, reconoció este miércoles.
Asimismo, durante su intervención en Dubái, habló de la inteligencia artificial, “algo que nos tiene que preocupar bastante”. Señaló que el sistema ChatGPT “ha ilustrado a la gente lo avanzada que está la Inteligencia Artificial”.
A finales de diciembre, el multimillonario sudafricano anunció por primera vez que planeaba dejar el puesto al frente de la red, y que buscaba “alguien bastante loco” para tomar su relevo.
Desde la llegada de Musk, Twitter ha registrado despidos masivos, el regreso a la plataformas de cuentas que estaban prohibidas y la suspensión de periodistas críticos con el magnate.
Los tuits racistas o con mensajes de odio se han multiplicado, lo que ha generado preocupación entre los reguladores de internet y la desbandada de grandes anunciantes, principal ingreso de Twitter.
Musk, uno de los empresarios más ricos del mundo, también ha sido criticado por haber descuidado sus otros negocios, especialmente la compañía de automóviles Tesla, cuyas acciones perdieron valor desde que tomó el control de Twitter. Y tiene un largo historial de promesas futuristas que quedaron en el aire.
La semana pasada, miles de usuarios de Twitter denunciaron problemas al utilizar la plataforma cuando la red social empezó a permitir a los usuarios de pago publicar tuits de hasta 4.000 caracteres.
Los medios tecnológicos estadounidenses informaron de que Musk pidió al personal de Twitter que dejara de lado el trabajo en nuevas funciones para centrarse en la resolución de problemas.
A pesar de las dificultades, el jefe de Twitter animó a aumentar la comunicación. “Como foro de comunicación, es genial. Y yo animaría a una mayor comunicación… a hablar con una voz auténtica”.
“A veces, la gente tiene a otra persona como gestor de Twitter o algo así. La gente debería hacer sus propios tweets… Creo que esa es la forma de hacerlo”.