El Ejército de Estados Unidos está ofreciendo por primera vez una bonificación máxima de 50.000 dólares por alistamiento a los reclutas altamente calificados que se incorporen por seis años, según se enteró The Associated Press, en un momento en que los oficiales pasan apuros para atraer a soldados a ciertos trabajos cruciales durante la pandemia.
El mayor general Kevin Vereen, jefe del Comando de Reclutamiento del Ejército, dijo a la AP que el cierre de escuelas y el competitivo mercado laboral el año pasado han supuesto desafíos considerables para los reclutadores. Por ello, en un momento en que se avecinan los meses más difíciles del año para reclutar personal, el Ejército confía en que algún dinero extra y ciertos cambios más alienten a personas jóvenes calificadas a enrolarse.
“Aún estamos viviendo las implicaciones de 2020 y el surgimiento del COVID, cuando los sistemas escolares prácticamente cerraron”, dijo Vereen. “Perdimos una clase completa de hombres y mujeres jóvenes con los que no tuvimos contacto cara a cara”.
Algunos, dijo Vereen, se están tomando lo que él llama un año sabático, “y están decidiendo que no necesariamente necesitan trabajar ahora».
La meta anual de reclutamiento fluctúa, pues los soldados que están en servicio deciden si vuelven a alistarse o se dan de baja. En los últimos dos años, en medio de los estragos de la pandemia, muchos decidieron quedarse, lo que restó presión al reclutamiento para mantener la fuerza completa del Ejército en 485.000 efectivos. La meta de reclutamiento del año pasado fue de 57.500, y Vereen señaló que este año la cantidad será más o menos la misma.
Para atraer reclutas, quienes se enrolen por seis años en alguna de las carreras de mayor demanda pueden recibir bonificaciones de hasta 50.000 dólares. Debido al elevado nivel de exigencia, a muchos les será difícil cumplir los requisitos para acceder a la bonificación más alta.
La cifra final depende de cuándo acepten emprender el adiestramiento, si es que ya poseen habilidades cruciales y si escogen puestos en sectores aéreos o en el terreno. Ciertas carreras —como tripulación de defensa con misiles, fuerzas especiales, y especialistas en señales de inteligencia y control de incendios que coordinen operaciones de armas en el campo de batalla— suelen recibir las bonificaciones más altas.
Pero otros empleos cruciales incluyen infantería, analista de inteligencia, especialista médico en combate, policía militar, ingeniero de combate y varios más. Y los bonos en esas posiciones podrían cambiar cada mes, con base en los puestos disponibles en los entrenamientos y otras necesidades del servicio.
Hasta ahora, el Ejército había ofrecido una bonificación máxima de 40.000 dólares.
