El 88 % de los ingresados por COVID-19 no cuentan con alguna dosis de la vacuna contra el virus, entre tanto, un 7 % tiene una sola.
La afirmación la realiza el ministro de Salud Pública, Daniel Rivera, en declaraciones a Diario Libre, al señalar a través de unas radiografías del tórax, que los no vacunados llegan a los centros hospitalarios con los pulmones altamente comprometidos.
De acuerdo con el boletín epidemiológico emitido este jueves, el 45 % de las camas habilitadas para atender a pacientes críticos con coronavirus está ocupado y el 28 % de las que se encuentran en cuidados intermedios. Entre tanto, el 34 % de los ventiladores está en uso.
Para atender a los pacientes con COVID-19 actualmente, las autoridades de Salud han habilitado 587 camas de intensivos, otras 2,266 para cuidados intermedios y 500 ventiladores.
Rivera señaló que un 5 % de los ingresados por COVID-19 cuenta con las dos dosis de la vacuna. Explicó que en estos influyen la edad y las comorbilidades, por lo que recomendó la dosis de refuerzo.
Por otro lado, Rivera señaló que nadie que tenga las tres dosis de la vacuna ha sido ingresado en una unidad de COVID-19, reafirma de esta manera la importancia del refuerzo.
A la fecha 1,242,001 personas han recibido la tercera dosis de la vacuna, lo que representa el 23 % de los que han completado el esquema de dos dosis.
Entre tanto, la presidenta de la Sociedad de Neumología y Cirugía del Tórax, Evangelina Soler, explicó que los pacientes que se infectan de COVID-19 tienen un curso de la enfermedad muy diferente dependiendo de los factores de riesgo de cada persona; sin embargo, los que tienen las tres dosis se ven poco afectados.
“Se ha visto de manera especial que pese a los factores de riesgo los vacunados con tres dosis, es decir dos dosis Sinovac y una tercera ya sea Pfizer o AstraZeneca han presentado muy pocos síntomas en la mayoría de los casos que solicitan atención médica”, dijo.
Soler indicó que todo lo contrario ocurre en los pacientes no vacunados, los cuales presentan afecciones de moderadas a graves, según factores de riesgo.
“Pueden tener importantes daños al aparato respiratorio, con limitaciones a la actividad física y en muchos casos se produce una importante dependencia de oxígeno, lo que se traduce en mayor esfuerzo respiratorio”, indicó.
La especialista explicó que esta situación hace que los pacientes consuman mucha energía y se produzca pérdida de la fuerza muscular y se convierte en un círculo vicioso que conlleva a mayor deterioro de la funcionabilidad del pulmón.
Niveles de vacunación
Por otro lado, el ministro resaltó que el 76 % de la población dominicana cuenta con la primera dosis de la vacuna contra COVID-19, mientras que casi un 62 % tiene la segunda.
El ministro afirmó que para lograr la meta , del 70 % con dos dosis, hacen falta 850,000 personas.
