SANTO DOMINGO.-La exclusión de la Comisión Ejecutiva del Partido Revolucionario Moderno (PRM) de varios dirigentes tradicionales es otro ruido innecesario para los evidentes aprestos reeleccionistas del presidente Luis Abinader, pues podría ser la antesala a una grave crisis interna en esa entidad política.
El malestar interno que provocó esa decisión está evidenciado por declaraciones de influyentes legisladores e importantes dirigentes de esa organización que, inclusive, se han reunido en más de una oportunidad para tratar el tema.
A ese hecho se agrega que miles de perremeistas siguen fuera de la nómina pública dos años después del ascenso al poder del partido de gobierno.
Pero además, existe en las bases del PRM la sensación de que hicieron campaña para llevar al poder a un gobierno que no responde a sus intereses, sino a la clase económica y social a la que pertenece el jefe del Estado.
Con frecuencia se oye a dirigentes de las bases perremeístas decir que no saldrán a las calles a hacer campaña por dirigentes que no les representan, dándole fuerza a la expresión de que el Gobierno está dividido entre “popis y Wawawa”.
Acusan a los actuales funcionarios, muchos de los cuales pertenecen a la denominada sociedad civil, de llenar la administración pública de familiares y allegados “que nunca se subieron a un camión para hacer campaña por el PRM”.
Afirman que esos funcionarios “extra partido” desconocen quienes son los dirigentes de las bases que trabajaron para que ellos hoy disfruten del poder estatal.
“Podrían tener el 100% de los votos popis. El problema es ¿Cuántos tienen de los wawawá”, escribió en sus redes sociales el ex senador por Monte Plata, Ramón Alburquerque, uno de los excluidos.
“En la Dirección Ejecutiva metieron oportunistas, convirtiendo el partido soñado en un mercado repleto de cabezas dóciles listas a repetir del dictado del dictadorcito”, dijo el ingeniero Alburquerque, uno de los más rabiosos críticos del Gobierno y la cúpula perremeista.
“Seguimos luchando, porque ningún mal dura 100 años y las elecciones están cerca”, insistió.
En declaraciones a los medios de comunicación Guido Gómez Mazara, otro de los excluidos, calificó la XXI Convención Nacional Ordinaria del PRM como “la más franca consideración de que el presidente Luis Abinader quiere una organización de obedientes y genuflexos, donde la democracia interna, el disenso, la participación y el enfrentamiento de ideas no sean parte de la misma”.
“Es la concepción privatizadora de la política y eso le hace daño a los partidos. Que se miren en el espejo de otras organizaciones”, expuso Gómez Mazara, quien desde hace meses recorre el país tratando de aglutinar a su alrededor de su proyecto presidencial.
Disgustado por los resultados de la XXI convención de su partido, la senadora por el Distrito Nacional, Faride Raful, renunció a ser parte de la Comisión Ejecutiva y cuentan que hasta se negó a contestar del presidente Abinader.
De su lado, el diputado Tonty Rutinel responsabilizó al presidente luis Abinader de la situación, durante una reunión del bloque de diputados del PRM.
Además de Alburquerque y Gómez Mazara quedaron excluidos del importante organismo del partido oficial, los dirigentes históricos, cuyos méritos políticos no son regateados por nadie, Tony Rafúl, Rafael Fafa Taveras., Alfredo Pacheco, Vicente Sánchez Baret, Pastora Médez , Rafael Antonio Báez (Cucuyo) y otros que hoy, en las primeras horas de la mañana, en la página webdel partido (PRM oficial), fueron presentados como de la Comisión Nacional de Asesores.
