Los meteorólogos estadounidenses continúan vigilando este miércoles una amplia zona de baja presión situada en el centro del Atlántico Norte, 900 millas (1.448 km) al noreste de las islas de Sotavento (Antillas Menores), que puede convertirse en una tormenta subtropical o tropical en los próximos días.
De acuerdo al Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EE.UU., las probabilidades de que el área derive en un ciclón se mantienen este miércoles en un 50 % tanto en el pronóstico de las próximas 48 horas como a cinco días vista.
El área de baja presión está ubicada al noreste de las Islas de Sotavento, frente a la costa de Venezuela, y está generando aguaceros y tormentas eléctricas, mientras se desplaza rumbo al noreste. Según el patrón de trayectoria, si se forma, la tormenta no afectará a tierra.
El NHC señala que para el viernes, la baja presión proseguirá este movimiento sobre aguas más frías e interactuará con una vaguada en las latitudes medias, lo que limitará el desarrollo subtropical o tropical del sistema.
Oficialmente, la temporada de ciclones en la cuenca atlántica finalizó el 30 de noviembre.
Durante la temporada ciclónica 2022 en la cuenca atlántica, que va del 1 de junio al 30 de noviembre, se formaron 14 tormentas con nombre, de las cuales ocho llegaron a huracanes y dos de ellos, Fiona e Ian, huracanes mayores.
Ian, que tocó tierra en Cuba y en Florida (EE.UU.) a fines de septiembre con categoría 4, fue el huracán más peligroso de una temporada que los expertos habían augurado que iba a ser «activa».
Una temporada de huracanes promedio tiene 14 tormentas con nombre, 7 huracanes y 3 huracanes importantes, según el NHC.