- Aprovechó la ocasión para reiterar necesidad de un muro fronterizo
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, usó ante un contingente de miembros del sindicato de la Guardia Fronteriza a la nieta de la dominicana asesinada en Queens para a atacar a los inmigrantes irregulares alegando que son “violadores, pandilleros, criminales y asesinos”.
Trump presentó a la adolescente Daria Ortiz, nieta de María Fuertes, de 92 años, asesinada por el inmigrante guyanés Reeaz Khan, en el Auditorio del Tribunal Sur en el Edificio de la Oficina Ejecutiva de Eisenhower de la Casa Blanca, donde el mandatario encabezaba un acto.
Trump le cedió el turno a la joven para que hablara del crimen y explicara porque el inmigrante estaba en las calles. Asimismo, aprovechó la oportunidad para reiterar la necesidad de terminar la construcción de un muro fronterizo.
“Desafortunadamente mi abuela tuvo que ser un ejemplo de por qué estos crímenes horribles nunca deberían suceder”, dijo la joven de 19 años.
“La tragedia es que esto podría haberse evitado si no hubiera una ley de santuario. El sistema no solo le falló a nuestra familia, sino que le falló a nuestra ciudad”, precisó.
Trump mencionó la tragedia en su discurso sobre el Estado de la unión en el que arremetió contra la política de la ciudad santuario de Nueva York afirmando que Fuertes aun estaría viva si su asesino hubiera sido entregado a la ICE después de sus primeros arrestos.
“Pedí que ingresaran al criminal, pero fue liberado bajo las leyes santuario de Nueva York”, concluyó.