El Servicio Federal de Seguridad (FSB) ha detenido a once personas en relación con el atentado en una sala de conciertos cerca de Moscú que ha dejado más de 60 muertos.
Entre los detenidos se encuentran cuatro terroristas que participaron personalmente en el ataque, según informó el director del FSB, Alexandr Bórtnikov, al presidente ruso, Vladímir Putin.
Los sospechosos fueron detenidos en la región de Briansk, fronteriza con Ucrania.
De acuerdo con los servicios de seguridad rusos, los terroristas pretendían cruzar la frontera hacia Ucrania y mantenían “contactos” con representantes de ese país.
“Después del ataque terrorista, los delincuentes pretendían cruzar la frontera ruso-ucraniana y tenían contactos pertinentes en el lado ucraniano”, señaló el FSB en un comunicado.
“La investigación del ataque terrorista continúa”, agregó.