La República Dominicana es el país con la tasa más alta de cesáreas en toda Latinoamérica.
Según estadísticas, el 58 por ciento de los nacimientos registrados en República Dominicana en 2019 se produjeron por cesárea.
Mientras hay casos de partos donde este procedimiento es necesario, especialistas consideran que la mayoría de veces, esta intervención no es conveniente e incluso podría poner en riesgo la salud de la madre.
Según estadísticas del Ministerio de Salud Pública y de las clínicas privadas, la proporción denacimientos por cesáreas en hospitales ronda el 55 por ciento y en los centros privados un 90 por ciento.
Aunque la cesárea ayuda a evitar complicaciones en partos de alto riesgo y puede salvar la vida de la madre y el niño en situaciones de emergencia, cada vez más personas se cuestionan la necesidad de realizar tantos de estos procedimientos hoy en día.
El miedo al dolor y la conveniencia de médicos y mujeres que quieren programar la fecha de parto, son algunas de las causas más frecuentes para la realización de una cesárea.
Contrario a los beneficios del parto natural, los bebes que nacen de una cesárea, podrían tener a largo plazo entre un 20 a 25 por ciento mayor incidencia de diabetes, asma y sobrepeso, aparte de diferencias en el desarrollo de su sistema inmunitario.
La recuperación de la cesárea es mucho más compleja y dolorosa que la de un parto natural. Usualmente, la cicatriz por este procedimiento tarda alrededor de 10 días para curarse.