Corea del Norte ha avisado este viernes a Estados Unidos de que no «interfiera» en las relaciones intercoreanas, después de que el Departamento de Estado estadounidense asegurara estar «decepcionado» por el cierre de los canales de comunicación entre Pyongyang y Seúl.
Estados Unidos urgió a Corea del Norte a retomar el camino de la diplomacia y la coordinación con Corea del Sur, aliado del país norteamericano, al tiempo que aseguró que mantiene una «estrecha coordinación» con Seúl.
«Esto es, de hecho, ridículo», ha zanjado el director del Departamento de Asuntos estadounidenses del Ministerio de Exteriores de Corea del Norte, Kwon Jong Gun. «Nadie tiene derecho a decir esto o lo otro sobre las relaciones intercoreanas, que pertenecen a los asuntos internos de la península de la A a la Z», ha agregado Kwon en un comunicado recogido por la agencia de noticias norcoreana, KCNA.
«Si Estados Unidos mete la nariz en los asuntos de otros con declaraciones descuidadas, lejos de ocuparse de sus asuntos internos en un momento en que su situación política está en la peor confusión, puede encontrase algo desagradable difícil de manejar», ha continuado, remarcando que «parece» que Estados Unidos continúa fracasando en entender correctamente «el creciente resentimiento» de los norcoreanos.
«Es mejor que Estados Unidos se mantenga callado y se ocupe de sus asuntos internos primero si no quiere experimentar algo horrible», ha avisado. «Sería bueno no sólo para los intereses de Estados Unidos, sino también para la celebración fácil de las próximas elecciones», ha amenazado.