El príncipe Andrés de Gran Bretaña, acusado en una demanda de abusar sexualmente de una adolescente de 17 años que le habría proporcionado el financiero Jeffrey Epstein, accedió a un acuerdo legal por el que hará una importante donación a la organización benéfica de la acusadora al tiempo que declaró que nunca buscó dañar su reputación, según documentos judiciales presentados el martes.
El acuerdo evita un juicio que habría dado una mayor vergüenza a la monarquía. Además de la donación para la organización benéfica de Virginia Giuffre, cuyo monto no fue revelado, el acuerdo señala que Andrés reconoce que Giuffre ha sufrido como víctima de abuso. No especifica si Giuffre recibirá personalmente dinero como parte del acuerdo.
El abogado David Boies, quien representa a Giuffre, dijo en una carta al juez federal de Nueva York que supervisa el caso que el acuerdo en principio había sido alcanzado y que los abogados de ambas partes solicitarían que se desestime la demanda en el próximo mes.
El abogado de Andrés no devolvió de momento un mensaje en busca de comentarios.
El juez Lewis A. Kaplan dijo que suspendería el caso hasta el 17 de marzo, cuando podría fijar una fecha para el juicio si los abogados no han pedido que sea desestimado para entonces.
Giuffre, de 38 años, demandó a Andrés, de 61, en agosto. La ciudadana estadounidense acusó al miembro de la realeza británica de abusar de ella mientras ella viajaba con Epstein.
Andrés negó rotundamente las acusaciones de Giuffre e intentó que la demanda fuera desestimada este año.
Junto con la carta de Boies había un comunicado que decía: “Virginia Giuffre y el príncipe Andrés han llegado a un acuerdo fuera de la corte. Las partes presentarán una desestimación estipulada cuando Giuffre reciba el acuerdo (la suma que no será revelada)”.
“El príncipe Andrés tiene la intención de hacer una donación sustancial a la organización benéfica de Giuffre en apoyo a los derechos de las víctimas. El príncipe Andrés nunca tuvo la intención de hacer daño a la reputación de Giuffre y acepta que ella ha sufrido como una víctima establecida de abuso y por el resultado de ataques públicos injustos”.
De acuerdo con el comunicado, el príncipe Andrés reconoció que Epstein traficó a “innumerables jovencitas” a lo largo de muchos años y señala que el príncipe “se arrepiente de su asociación con Epstein y elogia la valentía de Giuffre y otras sobrevivientes de levantarse por ellas y por otros”.
También prometió apoyar a víctimas de tráfico sexual como parte de su muestra de arrepentimiento.
Después de que Kaplan tomó una decisión sobre el caso, a Andrés, quien ya había renunciado a sus deberes reales, le fueron retirados sus títulos militares honorarios y sus puestos, incluyendo algunos de liderazgo, en varias organizaciones benéficas, conocidos como patronatos reales. Tampoco puede usar más el título de “su alteza real” de manera oficial.
La decisión fue un esfuerzo para aislar a la Casa de Windsor de la caída ante la posibilidad de años de encabezados sórdidos si la demanda proseguía.
Surgió después de que más de 150 veteranos y miembros en activo de las fuerzas armadas le pidieron a la reina retirar los títulos militares a su segundo hijo, argumentando que no había logrado vivir “con los más altos estándares de honradez, honestidad y conducta honorable” que se espera de los oficiales británicos.
Mark Stephens, un abogado internacional, dijo que la presión para la familia real habría empujado a Andrés a llegar a un acuerdo legal, especialmente mientras la reina Isabel II celebra su Jubileo de Platino por 70 años en el trono. El comunicado cuidadosamente redactado, en el que Andrés sólo admite una desafortunada asociación con Epstein, le permite salvarse, dijo Stephens.
“Esencialmente, lo que ha hecho es arrojarse esta granada judicial para prevenir un mayor daño para la familia real”, dijo Stephens a The Associated Press. “Y creo que no tenía alternativa más que llegar a un acuerdo porque de otra forma su caso habría realmente opacado el jubileo de la reina y habríamos escuchado los detalles de lo que fue acusado de hacer con Virginia Giuffre. Y todo eso habría causado realmente problemas para la familia real de manera más general”.
Stephens estimó que Andrés pagaría unos 10 millones por el acuerdo legal tras obtener el dinero por la venta de un chalet de esquí “a precio de remate”. Conjeturó que el dinero será dividido en tres partes desiguales, entre Guiffre, sus abogados y organizaciones benéficas.
Además del acuerdo Giuffre podrá impulsar su apoyo a las víctimas de abuso y evitará revivir “toda esta experiencia en el circo público de una corte”, dijo.
“Ha sido reivindicada en el sentido de que el príncipe Andrés reconoce que ella ha sido víctima de abuso”, dijo Stephens.
Giuffre había declarado que conoció a Andrés cuando ella viajaba frecuentemente con Epstein entre el año 2000 y el 2002, cuando sus abogados afirman que ella estaba “disponible a las llamadas de Epstein para propósitos sexuales” y fue “prestada a hombres poderosos”, incluyendo Andrés.
En su demanda Giuffre dice que todavía sufre de angustia psicológica y emocional así como daños. Ha dicho que tuvo sexo con Andrés en tres ocasiones: En Londres durante un viaje de 2001, en la mansión de Epstein en Nueva York cuando tenía 17 años y en las Islas Vírgenes cuando tenía 18 años.
Andrés negó en repetidas ocasiones las acusaciones de Giuffre y ha dicho que no puede recordar haberla conocido, aunque hay una fotografía de Giuffre y Andrés juntos en la casa de la ex pareja y empleada de Epstein, Ghislaine Maxwell, en Londres en la que el príncipe tiene el brazo alrededor de la cintura de Giuffre, quien lleva una ombliguera, y quien incluyó la fotografía en su demanda.
Las inconsistencias en las declaraciones de Giuffre a lo largo de los años, que habrían sido subrayadas por los abogados de Andrés en el juicio, podrían haberla motivado, en parte, para llegar al acuerdo. Aunque ella las ha explicado como errores inocentes que ocurren al recordar eventos traumáticos años después.
El acuerdo puede ser un alivio para otros más allá del príncipe y Giuffre por los nombres que habrían salido a relucir.
Además de Andrés, Giuffre ha dicho que fue traficada sexualmente para el ex gobernador de Nuevo Mexico Bill Richardson, el ex senador federal George Mitchell, el famoso abogado Alan Dershowitz, el buscador de modelos francés Jean Luc Brunel y el multimillonario Glenn Dubin, entre otros. Todos han dicho que sus versiones son inventadas.
Andrés rindió servicio en la Armada Real por dos décadas incluyendo su puesto como piloto de helicóptero durante la Guerra de las Malvinas. Los títulos militares honorarios que perdió incluyen varios en el extranjero, como el título de coronel en jefe del Regimiento de Logística de la Armada Real de Nueva Zelanda.
El príncipe ha pasado años combatiendo temores sobre sus vínculos con Epstein, el financiero estadounidense que se suicidó a los 66 años en una prisión federal de Manhattan en 2019 mientras esperaba a ser enjuiciado por tráfico sexual de menores. Maxwell fue sentenciada por cargos relacionados el mes pasado.
El acuerdo de la demanda de Andrés sigue acuerdos alcanzados por Giuffre hace años para resolver demandas por aparte contra Maxwell y Epstein. Recientemente se reveló que Epstein llegó a un acuerdo por 500.000 dólares.
The Associated Press no suele identificar a personas que dicen que han sido víctimas de abuso sexual a menos de que denuncien públicamente como lo ha hecho Giuffre.