Una llamada anónima alertó a las autoridades de Estados Unidos sobre paquetes sospechosos que dos mujeres llevaban en su caminoeta Ford SUV en Brownsville, Texas,hace unos días.
Agentes de la patrulla fronteriza pidieron a Carla Michelle Resendiz y a su hija Ashley Renee Resendiz que detuvieran el vehículo para hacer una inspección y encontraron 125 kilos de marihuana junto a un bebé que bebía leche en el asiento trasero.
Madre e hija fueron arrestadas por cargos de posesión de marihuana con la intención de distribuirla y conspiración.
Los elementos de aduanas y proteccion fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) fueron alertados por una persona anónima desde el 12 de abril, según detalló Dallas Morning News. Alertó que vio a la camioneta ser cargada con los sospechosos paquetes en el River Bend Golf Course.
Según las autoridades, ese lugar es famoso por ser un «corredor de contrabando» de drogas a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.
Los oficiales encontraron cinco maletas con marihuana en el portaequipaje y junto a un bebé en su silla. Llamó la atención que la camioneta tenía un letrero de «bebé a bordo» en la ventana trasera.
En el celular de Carla Resendiz encontraron detalles del lugar donde recogieron la droga.
Ella fue liberada tras pagar una fianza de USD 75.000 más condiciones severas, incluida el no tener contacto con su hija, con quien vive; además no puede consumir alcohol ni viajar a México. El jueves pasado le dijo a la corte que encontraría alojamiento alternativo.
Según The Brownsville Herald, la joven de 22 años identificada como Ashley, permanece en custodia hasta su juicio.
Sin embargo, se desconoce la identidad de los padres del bebé, así como su edad. Las autoridades llevaron al niño ser resguardado por un familiar.
Fuente: Infobae