Fueron trasladados a la cárcel de Najayo Hombres y Mujeres, los imputados en la Operación Coral, un caso en el que el Ministerio Público acusa a un grupo de formar un entramado militar- religioso.
El traslado se hizo antes de las 6:00 de la mañana de este miércoles. Los imputados Adán Cáceres Silvestre, exjefe de escolta del expresidente de la República Danilo Medina; el teniente coronel de la Policía, Rafael Núñez de Aza; el cabo de la Policía e hijo de la pastora Rossy, Tanner Antonio Flete Guzmán y el sargento Alejandro José Montero Cruz, cumplirán 18 meses prisión preventiva en el centro Najayo Hombres, en San Cristóbal.
Mientas la pastora Rossy Guzmán Sánchez, fue llevada también por 18 meses, al penal Najayo Mujeres. En el caso del mayor Raúl Girón Jiménez, ya cumple prisión domiciliaria en un lugar solo conocido por el Ministerio Público y el tribunal por su seguridad.
El grupo fue enviado a prisión tras la jueza Kenya Romero acoger la solicitud del Ministerio Público.
El MP ha dicho que este caso continúa y que es muy complejo.
Wilson Camacho, director de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), dijo que el hecho de que un grupo haya tomado dinero público para su bolsillo es grave “y son cosas que el Ministerio Público pretende que con el procesamiento que se está haciendo estos hechos de corrupción se corrijan en el futuro”.
Girón Jiménez
En la audiencia de medida de coerción Raúl Alejandro Girón Jiménez delató el funcionamiento de la supuesta red de corrupción que dirigía el mayor general Adán Cáceres.
Admitió su responsabilidad en el caso y dijo que no podía esconder la verdad.
Aceptó toda la acusación que ha presentado el Ministerio Público y señaló que el coronel Núñez de Aza dirigía la parte financiera de la supuesta red.
La presunta red está acusada de manejar tres mil millones de pesos.