El Juzgado de Atención Permanente de Monte Cristi aplazó para hoy martes el conocimiento de medida de coerción presentada por el ministerio público contra seis imputados, incluyendo una fiscal, por el allanamiento irregular y subsiguiente plantación de droga en una barbería en Villa Vásquez.
El aplazamiento se debió a que la jueza Javielka Antonia Gómez es maestra de Otoniel Cruz, uno de los jóvenes querellantes y, a su vez, empleado de la barbería.
Cuando la exfiscalizadora era conducida por los pasillos del Palacio Justicia, varias personas que presenciaban el hecho comenzaron a vociferarle de fuerte contenido y carga de enojo; entre estos, algunos que aseguraban haber sido afectados por las malas acciones de Núñez.
“Por los mismos pasillos que tú me pasaste, te están pasando a ti, abusadora”, le gritó a la acusada un hombre, no identificado, a lo largo del pasillo del tribunal.
El ministerio público solicitará un año de prisión preventiva para la exfiscal Carmen Lisset Núñez, y los exagentes de la DNCD, Víctor Ignacio Encarnación, Juan de Dios Heredia, Adán Mauricio Rodríguez Pichardo y Juan Antonio Arias.
Otro acusador de Núnez
Tras la viralización del caso de la presunta colocación de drogas en una barbería de Villa Vásquez, han salido a luz otras presuntas víctimas de la exfiscalizadora, Carmen Lisset Núñez.
Francisco Fernández, quien ayer estuvo a las afueras del Palacio de Justicia de Monte Cristi, denunció que en 2017 Núñez le colocó droga frente a sus dos hijas, en Villa Vásquez.
“Yo le dije a ella (la ex fiscalizadora): ‘No me ponga esa droga, mira esas dos niñas donde están gritando; no me hagas daño que esas niñas viven de mí, piensa en Dios, véalo ahí donde está, que tengo una foto grande’, dijo Fernández, a lo que esta habría preguntado: ‘¿Dónde está Dios? Yo no lo veo. Dios soy yo”.
También dice que le pedía “días tras días, hora tras hora y minuto a minuto” a la justicia divina, “para que Núñez pagara por este tipo de crimen”.
La barbería allanada por cinco agentes antidrogas en compañía de la exfiscal de Villa Vásquez fue reabierta tres días después del incidente y, según informes provenientes de esa población, un número mayor de personas busca los servicios de los jóvenes propietarios de ese negocio, que pertenecen a la iglesia evangélica Metodista Libre.?
Todo silencio.
Tras el escándalo causado por el allanamiento y plantación de drogas, hasta ahora, lo único que ha dicho la exfiscalizadora, implicada en la trama contra los dueños de la barbería, ha sido lo siguiente: “No soy culpable de lo que se me acusa. El narcotráfico está muy interesado en que yo dejara de ser fiscal y no digo que ganará el narcotráfico, porque hay más fiscales que lo van a perseguir”.
Fuente: Listin Diario