La Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (Binuh) manifestó ayer miércoles estar «muy preocupada» por el empeoramiento de la situación de seguridad en el país, días después del atroz asesinato de una joven estudiante de secundaria.
«La Binuh está muy preocupada por el empeoramiento de la situación de seguridad y la violencia cometida por las bandas armadas contra la población», escribió el organismo de la ONU en su cuenta de Twitter.
La inseguridad y los actos de violencia van en aumento en este país caribeño donde las autoridades son criticadas por sus inacciones.
«Las Naciones Unidas siguen estando disponibles para apoyar a las autoridades nacionales, que deben proteger a la población y detener a los instigadores, los autores y los cómplices de los delitos», agregó el organismo.
En tiempos recientes, Haití ha sufrido semanalmente casos de secuestro, robo, violación y asesinato, mientras la Policía Nacional se muestra completamente impotente.
Evelyne Sincère, una estudiante de secundaria de 21 años, fue secuestrada, violada, asesinada y su cuerpo lanzado a la basura, donde fue localizado por sus familiares el 1 de noviembre en la barriada de Delmas, en la capital.
En las redes sociales y en los medios de comunicación tradicionales, la ciudadanía expresó su consternación e indignación tras el crimen.
El presidente haitiano, Jovenel Moise, en al menos dos discursos pidió acciones concretas por parte de la Policía.
«Los carteles de ‘se busca’ no son suficientes. Los criminales deben ser arrestados», dijo Moise en durante la inauguración de un edificio público ayer.
En una nota publicada ayer, la Oficina de la Protección Ciudadana (OPC), una entidad nacional independiente dirigida a proteger los derechos humanos, dijo que estaba consternada por el horrendo asesinato.
«Este caso se suma a la larga lista de víctimas de actos de bandidaje e inseguridad de las últimas semanas», dijo la OPC.
«Los bandidos siembran el luto y el miedo con impunidad en todos los estratos sociales del país, en las ciudades, en las secciones comunales y en los barrios», afirmó la nota.
Luego del asesinato de la joven estudiante, se han producido algunos movimientos de protesta en las calles exigiendo que las autoridades asuman su responsabilidad y capturen a los asesinos.
En los últimos meses, Haití enfrenta un aumento extraordinario en el clima de inseguridad y violencia marcado por las guerras abiertas entre bandas armadas, las masacres y el aumento de los casos de secuestro.