La muerte de un joven negro a manos de una policía que se presume disparó por accidente cuando pretendía usar una pistola inmovilizadora atizó la tensión en las calles de Minneapolis, en medio del juicio contra un exagente acusado por la muerte de George Floyd que tiene en vilo a Estados Unidos.
El presidente Joe Biden se pronunció sobre el incidente ocurrido el fin de semana y dijo que las manifestaciones pacíficas son comprensibles, pero que «no hay absolutamente ninguna justificación» para los pillajes.
Después de una noche marcada por las protestas, el alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, decretó un toque de queda a partir de las 19H00 (00H00 GMT del martes) este lunes, que regirá también en la vecina Saint Paul y en los tres condados del área metropolitana, incluyendo Hennepin, donde ocurrió el incidente.
Daunte Wright, un joven afroestadounidense de 20 años, murió tiroteado por «accidente» cuando conducía por Brooklyn Center, un suburbio de Minneapolis el domingo, según la policía.
Los agentes habían ordenado detener al conductor del vehículo por una infracción de tránsito. Cuando descubrieron que tenía una orden de detención pendiente, intentaron arrestarlo.
Este lunes, el comandante de la policía de la localidad de Brooklyn Center, Tim Gannon, señaló que el incidente «accidental», y dijo que la agente involucrada no quería disparar, pero que confundió su arma de fuego con su pistola inmovilizadora o taser.
«Fue una descarga accidental que resultó en la trágica muerte» de Wright.
La policía, que según su superior era una agente experimentada, fue suspendida y su nombre no ha trascendido.
Muerte por asfixia
Esta nueva muerte de un ciudadano negro a manos de la policía revivió el trauma de una ciudad que sufrió varias noches de incidentes tras la muerte de George Floyd el pasado 25 de mayo.
En la noche del domingo la policía disparó gases lacrimógenos para dispersar a una multitud que se congregó fuera de la estación de policía de Brooklyn Center.
Tras los incidentes, la defensa del exagente acusado por la muerte de Floyd, Derek Chauvin, le pidió al juez que dirige el proceso que aislara al jurado, preocupado de que las protestas pudieran influir en su decisión.
«El veredicto de este caso va a tener consecuencias», afirmó el letrado Eric Nelson y se preguntó si el jurado va a tener la confianza de tomar la decisión sin importar las posibles consecuencias.
Pero tanto la fiscalía como el juez se negaron a aislar al jurado.
«Los vamos a aislar el lunes, que es cuando anticipamos los alegatos de cierre», indicó el magistrado.
Chauvin enfrenta cargos de asesinato y homicidio por su rol en la muerte de Floyd, después de inmovilizarlo colocándole su rodilla en el cuello cuando le arrestaba por supuestamente haber pagado con un billete falso.
Varios videos muestran a Chauvin presionando el cuello de Floyd durante más de nueve minutos mientras éste le dice en reiteradas ocasiones que no puede respirar.
Las imágenes desataron una ola de protestas contra el racismo y la brutalidad policial en Estados Unidos y alrededor del mundo.
La fiscalía busca probar que la muerte de Floyd se produjo por asfixia causada por la acción de Chauvin durante el arresto y para ello han llamado al estrado a varios médicos.
Por su parte, la defensa esgrime argumentos de que el fallecimiento está relacionado con el consumo de fentanilo, encontrado en la sangre de Floyd, sumando a factores de salud.
Este lunes testificó el reconocido cardiólogo Jonathan Rich, quien afirmó que la muerte se debió a los bajos niveles de oxígeno inducidos por «asfixia posicional» a la que fue sometido.
«No veo ninguna evidencia de que una sobredosis de fentanilo haya provocado la muerte de Floyd», afirmó Rich.
«Un hijo de mamá»
Además, fue interrogado Philonise Floyd, uno de los hermanos del fallecido, bajo una norma local de Minnesota que permite a los fiscales citar a una persona cercana para que los jurados tengan una percepción sobre la personalidad de la víctima.
El hermano de Floyd contó -con la ayuda de sus fotos familiares- sobre la predilección de George por los bocadillos de mayonesa y banana, su afición por el deporte y su cercanía con su madre, muerta en 2018. «Era un hijo de mamá», dijo con lágrimas.
En tanto, la poderosa organización de derechos civiles ACLU indicó que el fallecimiento de Wright es una de las 260 muertes provocadas por la policía en lo que va de 2021.
«¿Qué es lo que tiene que pasar para que las fuerzas del orden dejen de matar a personas de color?», dijo en un comunicado Ben Crup, el abogado de la familia Floyd, que también representará a los deudos de Wright.