Preocupada por la descomposición social que se puede observar especialmente en las redes sociales, la joven Miguelina Alonzo decidió emprender un proyecto comunicacional a los fines de concienciar e inculcar buenos valores a la sociedad.
Sin embargo, quiso hacerlo de una manera diferente, a través de cortometrajes, que los lleva a su perfil de Facebook cargados de reflexión y moralejas distintas.
Para hacer este sueño posible, la joven de 23 años, encontró apoyo en su esposo Alfred González, con quien formó un pequeño equipo de producción que la ayudan a materializar sus ideas.
“Nosotros tenemos un equipo de grabación que se encarga de toda la producción. Algunas de las historias son escritas por nosotros y otras las adaptamos de vivencias reales que nos envían nuestros seguidores”, explicó Alonzo, quien curiosamente es estudiante de Agrimensura.
Con cuatro años en el aire, el proyecto cuenta con más de 18 mil suscriptores en YouTube, siendo Facebook su principal plataforma con 400 mil seguidores, donde, en su mayoría pasan los 1.8 millones de reproducciones.
Este espacio es para todo público, pero en especial a la comunidad joven, que muchas veces luce confundida.
Alonzo y su esposo, González, además de ser creadores de contenido, sueñan con poder crear una fundación para llevar ayuda a personas y animales.
