SANTO DOMINGO. -El director del Centro de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), Jorge Marte, consideró que no es prudente abrir las escuelas públicas y privadas en el territorio nacional, en momentos en que clínicas y hospitales están llenos de enfermos de coronavirus y habiendo todavía cepas mutantes del virus circulando.
Marte Báez, especialista en medicina crítica y cuidados intensivos, ex asesor médico del Poder Ejecutivo, consideró que las autoridades debieron esperar a que los contagios disminuyeran.
Ayer, el ministro de Educación, Roberto Fulcar, informó que el 25 de este mes serán abiertas las clases semipresenciales en escuelas y los colegios privados de los 158 municipios del país, en los niveles inicial, primario, de adultos y sexto grado del técnico profesional y artes, durante una rueda de prensa en la sede de esa entidad.
Empero, el director de Cedimat expresó preocupación por la medida, argumentando que ““Hay cepas en las que no se garantiza la efectividad de ninguna vacuna”.
Marte Baez, pecialista en Medicina Interna, quien formó parte de la comisión de alto nivel para la prevención y control del coronavirus, trató el tema durante una entrevista en el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio.
Estuvo acompañado de los doctores César Herrera, director del Centro Cardiovacular de Cedimat; Julia Rodríguez, directora del Departamento de Gestión del Conocimiento y Epidemiología y Herwin Speckter, gerente de Tecnología Médica.
Manifestó que, en Cedimat, las camas de cuidados intensivos destinadas a los enfermos de coronavirus están ocupadas en un 100 por ciento.
“Parece que esa la situación no es diferente a la de otros centros”.
“Esperaría unos días para abrir las clases”, insistió. En otro orden, consideró que el Gobierno debió vacunar un mayor procentaje de la población con la primera dosis.
“Es mejor tener un gran porcentaje con la primera dosis. Es mejor tener una dosis que cero dosis”, dijo, aunque reconoció que las autoridades han sido diligentes en gestionar las vacunas para la segunda dosis.
Restó importancia a que las vacunas sean de una marca u otra, argumentando que “cualquier vacuna es mejor que ninguna.