El presidente del Comité Olímpico Internacional Thomas Bach llegó el sábado a Pekín, dos semanas antes del inicio de los Juegos Olímpicos de invierno (4-20 de febrero), según indicó este lunes el COI a la AFP.
«Por precaución guarda un aislamiento de tres días, antes de comenzar con su agenda oficial el martes», precisó un portavoz de la organización olímpica.
El COI reúne a su comité ejecutivo el 2 de febrero, y después vivirá su 139ª sesión el 3 de febrero.
Pekín y las otras dos sedes olímpicas vecinas, que acogerán también los Juegos Paralímpicos (4-13 de marzo), implantaron una estricta burbuja sanitaria para evitar cualquier contacto entre los participantes en los Juegos y la población china.
Desde el inicio de la pandemia, las autoridades aplican una estrategia ‘cero covid’, con restricciones de desplazamiento y confinamientos por zonas concretas, para así limitar al máximo la aparición de nuevos casos.
Aun así surgen de vez en cuando nuevos focos de contagio estos últimos meses, por lo que el país redobla la vigilancia según se acerca la cita olímpica: el sábado, la ciudad de Pekín anunció un cribado entre todos los habitantes de un barrio después del descubrimiento de un foco, a unos 20 kilómetros de la sede que albergará las pruebas de esquí acrobático freestyle y de snowboard.