El mayor almacén de alimentos de Europa es convertido en una morgue y funeraria.
La instalación en las afueras de París se ha hecho necesaria por la acumulación de cadáveres a raíz de la crisis del coronavirus.
El jefe policial de la zona de París decidió convertir el almacén de Rungis para que pueda recibir ataúdes y cadáveres a partir del viernes. Las familias podrán dar el último adiós a sus seres queridos a principios de la próxima semana.
El almacén está ubicado en una zona aislada de una instalación masiva que surte a tiendas y otros mercados. La policía no ha especificado la capacidad total de la instalación.
Fuente: AP