El Ministerio de Educación envió este martes una comisión técnica al municipio de Boca Chica, para investigar porqué las autoridades de la escuela María Trinidad Sánchez suspendieron la docencia de manera inconsulta, “hasta nuevo aviso”, afectando a más de 500 estudiantes.
Sin previo aviso, los padres de los estudiantes recibieron un comunicado de parte del plantel educativo, donde les informaban que ya no podrían recibir a los niños, porque no contaban con las infraestructuras adecuadas ni con el personal para la limpieza.
La comisión del Ministerio está encabezada por Irá Oscar Amagós, viceministro de Supervisión y Control de la Calidad Educativa.
La investigación girará, principalmente, sobre informaciones que indican que el documento enviado a los padres para informarle sobre el cierre de docencia está firmado por la seccional de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) de Boca Chica. “Es un gran abuso de la ADP en Boca Chica”, expresó el Ministerio a los medios de comunicación.
La institución estatal calificó de abusiva la decisión, argumentando que ahora los padres no tendrán un lugar donde enviar a los hijos a recibir docencia.
“Es realmente un gran abuso contra los niños más pobres, a quienes se les impide una educación oportuna y el beneficio de la alimentación cotidiana“.
No hay excusas
“A los padres se les impide ir con tranqilidad al trabajo, tomando en cuenta que se trata de estudiantes del nivel básico, que necesitan mayores cuidados”, precisó.
“Los más afectados son los casi 600 niños que quedaron en las calles y sin un espacio donde recibir el pan de la enseñanza”.
El Ministerio argumenta que las condiciones físicas de un plantel no son excusas para cerrarlo, si previamente no existe una decisión de las máximas autoridades de esa dependencia.
En documento entregado a los padres del plantel refiere que «la escuela se mantiene con mucha deficiencia de limpieza, los baños sin desinfectar, mal olientes y poco higienizados”.
Agrega que “las aulas no tienen una limpieza constante se percibe en ellas un ambiente poco higiénico, para dar clases, razones por la que de ven forzados a abandonar las docencia.