Estudiado el mensaje del presidente Danilo Medina ante la reunión conjunta de los legisladores y sus invitados en el aniversario 175 de la Independencia Nacional, deben quedar pocas personas en este país con dudas de lo que vengo diciendo desde octubre de 2017: el gobernante agota una agenda clara en busca de la reelección.
Cuando comencé a abordar el tema, lo hice luego de largas observaciones del comportamiento de Danilo y los principales funcionarios de su equipo político.
Tomé la precaución de apartar sentimientos y deseos para poder ver la realidad y su perspectiva.
Dieciséis meses después de aquellas primeras afirmaciones, muy arriesgadas, el panorama político aparece mucho más claro en cuanto a que la opción reeleccionista de Danilo es su único plan.
Si aquella vez intenté que el universo político dominicano entendiera que el interés de reelección de Danilo era la fuerza motriz del panorama electoral de cara a las elecciones del año 2020, espero que el abrumador cúmulo de evidencias sirva para que me crean ahora, aunque se va haciendo tarde.
Paradójicamente -vuelvo a apartar deseos-, detener el triunfo de la candidatura de Danilo en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) es cada vez más difícil porque no tiene un solo adversario dispuesto a desafiar su propósito y mucho menos “a pagar el precio que haga falta por servir a nuestra patria”.
Frenar a Danilo es difícil
Peor aun, frenar el potro brioso de la reelección es una tarea desbordante para la oposición que no se opone a nada, en los hechos, y por tanto, una vez vencido y maniatado el competidor interno (Leonel Fernández), la cabalgata hacia el 17 de mayo de 2020 la hará el danilismo con Luna Llena.
¿Alguien sabe cómo se puede detener la candidatura de Danilo Medina por el PLD en las primarias del 6 de octubre de 2019? Por igual, una vez se conozca el resultado -el día 11 de octubre a más tardar- ¿sabe alguien cómo se puede derrotar la reelección presidencial? Al día de hoy, yo no lo sé.
Lo sabía en octubre de 2017 y lo dije sucesivamente en mis análisis, pero quien estaba en posibilidad de encabezar esa derrota, Leonel, no me escuchó, perdió el tiempo y ya es demasiado tarde para “traer trucos de magia, planes faraónicos o palabras grandilocuentes”, sobre todo si a quien le corresponde, a Leonel, está “chasqueando los dedos” y “haciendo click”, como estima Danilo, según sus propias palabras.
Cuando dije esa vez que Danilo estaba en buscar la reelección y que Leonel podía detenerlo si salía con tiempo del PLD, reenfocaba su programa, reagrupaba a la “oposición” y la echaba a pelear contra el gobierno, le estaba dando gratuitamente y sin esperar nada a cambio, el camino más expedito para él recomponer su trayectoria política y brindar un servicio a la democracia dominicana.
Pero no, por lógicos que pudiesen parecer mis planteos y pese a que él debe saber por experiencia propia que no soy pluma alquilada de nadie, perdió el tiempo cortejando a Danilo para que no reforme la Constitución que por ahora le impide ser candidato presidencial, convencido de que presentando números de encuestas, firmas y respaldo de masas, el gobernante iba a caer rendido a sus plantas como el diablo ante San Miguel o Belié Belcán.
Está llegando la hora
¿Qué hará Leonel, en las próximas semanas, cuando el “corneta” del danilismo entone el toque de ¡A degüello! llamando a reformar la Constitución para eliminar la imposibilidad de que Danilo se postule nuevamente para la Presidencia?
Si el leonelismo se resiste más allá de un discurso “para que conste en la historia” -lo que dudo mucho- tendrá que hacerlo fuera del PLD porque dos fuerzas telúricas cargadas de mucha energía cinética lo van a enfrentar y probablemente a demoler.
Esas fuerzas son el propio danilismo, que es Danilo y mucho más, y la maquinaria peledeísta que prefiere continuar en el gobierno con cualquier presidente que le garantice seguridad en su puesto, sueldo, impunidad y respeto a sus intereses.
Es un tonto quien piense que si Danilo es el candidato del PLD, las bases le van a dar la espalda en su empeño de buscar reelegirse para seguir controlando el poder del Estado y administrando el Presupuesto.
Medidas del gobierno
Aunque tardó mucho tiempo para hacerlo, el reajuste de los salarios públicos más bajos que acaba de disponer el presidente Medina es una política de gobierno de impacto importante en la masa de la población asalariada más grande y golpeada, en una economía que crece en forma dinámica cada año, aunque sus principales palancas sean el endeudamiento y la ventanilla siniestra del narcotráfico y el lavado de dinero.
Terminar con el despojo vulgar que hacen las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) con el ahorro obligatorio a que están expuestos los asalariados y sus patronos, sin esperanza de que alguien logre algún día una pensión o jubilación justa, es otra medida de impacto social importante.
Falta saber si Danilo tendrá fuerza en la muñeca para evitar que estas empresas binarias (porque son de bancos y para sostener ganancias bancarias) no torpedeen la reforma de la ley en el Congreso Nacional, donde ellas (las binarias) han demostrado que tienen mucho más poder que Barrick Pueblo Viejo, precisamente porque se rigen por estándares muy diferentes.
Cito solo esas dos decisiones de Medina buscando él apuntalar su popularidad, aunque hay más, para preguntar… ¿cree alguien en este país que Danilo impulsa esas políticas, frena el pacto fiscal, enciende a Punta Catalina al precio que lo está haciendo, para que Leonel encuentre el terreno fértil para ser el candidato del PLD y el casi seguro próximo Presidente de la República?
Sostengo que la respuesta es ¡Negativo, superior!, como gritaría cualquier soldado de Vengan a Ver, allá en Duvergé, provincia Independencia.
Todo eso lo está haciendo Danilo -constitucionalmente- para tener ascendiente popular y defensa cuando el danilismo emprenda la reforma de la Constitución para habilitarlo como candidato para buscar la reelección.
Por eso ha dicho claramente que está “para lo difícil”, mientras su principal adversario, que no es otro que Leonel, está “chasqueando los dedos” y “haciendo click”.
Arrancó la carrera de fondo
El Decreto 71-19, emitido el 24 de febrero de 2019, precedido por las declaraciones del ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, con las que expresó que el único político que gana en primera vuelta las elecciones de 2020 es Danilo, marca el punto de inflexión de la lucha por la reelección.
La colocación de piezas clave del danilismo en el activismo político del Distrito Nacional (Roberto Salcedo) y Santiago (Casimiro Ramos y Antonio Peña Mirabal), más el mensaje al país del 27 de febrero de 2019, debían despejar cualquier duda de que la “carrera de fondo” dio inicio y de ahora en adelante se verá el polvo que levanta la cabalgata reeleccionista, sin nadie, ¡dije nadie!, que le haga frente con determinación.
Para el próximo lunes 4 de marzo de 2019 está convocada la reunión del Comité Político del PLD y será la primera donde debe participar uno de sus miembros cancelado del gobierno (Franklin Almeyda), junto a quien lo canceló, que no es otro que el mismo presidente Medina.
De esa reunión hay que esperar decisiones para ir preparando al PLD para la participación en las primarias abiertas del 6 de octubre.
A los partidos alternativos, vuelvo a exhortarlos a que se concentren en las elecciones municipales, que traten de ganar regidores y alcaldes, porque la tarea de derrotar la reelección les queda muy grande, no por falta de condiciones objetivas que sobran, sino de las subjetivas que no aprenden a crear por falta de sensibilidad política y por carecer de humildad como la tienen quienes cosechan victorias. La tempestad está pasando, contaremos las estrellas.
Fuente: Listin Diario