Organizaciones de diversidad sexual en Perú elevaron este viernes su «enérgica protesta» contra el gobierno por un decreto que cataloga la transexualidad como un trastorno mental, siguiendo una vieja clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Es un decreto que nos retrocede más tres décadas, cuando se ‘descataloguizó’ la homosexualidad desde la OMS (…) No podemos vivir en un país donde nos consideren enfermas o enfermos», señaló a la AFP Jorge Apolaya, portavoz del Colectivo Marcha del Orgullo Lima.
Este viernes está convocada una protesta para exigir la derogación de la norma. La manifestación coincide con el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia.
Mediante un decreto publicado el 10 de mayo, el ministerio de Salud actualizó el Plan Esencial de Aseguramiento en Salud (PEAS), una lista de los beneficios mínimos a los que tiene derecho un afiliado de la salud pública, mixta o privada.
Ciñéndose a una antigua clasificación de enfermedades de la OMS, el gobierno quiso ampliar la cobertura en salud mental a tratamientos derivados de la identidad de género, por ejemplo, terapias de reafirmación u operaciones de reasignación de sexo.
Sin embargo, la clasificación que empleó, conocida como CIE-10, describe la transexualidad como un «trastorno mental», un término que la propia OMS eliminó en 2022 de su manual revisado de diagnósticos vigente desde ese año.
Una fuente del ministerio de Salud, que no quiso revelar si identidad, señaló este viernes a la AFP que de «momento no tiene información» sobre una eventual derogación del decreto.
En un comunicado previo, esa cartera explicó que utilizó la clasificación de la OMS que sigue vigente en Perú a la espera de que «se inicie la implementación progresiva» del nuevo manual de enfermedades, «tal como ocurre en otros países».
«Expresamos nuestro respeto a las identidades de género, así como nuestro rechazo a la estigmatización de la diversidad sexual», señaló el organismo.
Sin embargo, los colectivos advirtieron que mientras no se derogue la norma, las personas LGTB están expuestas a «graves consecuencias», como las mal llamadas terapias de conversión.
«No hay que olvidar que las terapias reparativas consistían en tratamientos (como) electroshock, baños en hielo», comentó el portavoz del Colectivo Marcha del Orgullo Lima.
Perú no reconoce el matrimonio ni la unión civil entre homosexuales, ni tiene una ley que permita que las personas trans incluyan en sus documentos su identidad de género.