Dina Boluarte se convirtió este miércoles en la primera mujer en asumir la presidencia de Perú, después de que el Congreso cesara de sus funciones a Pedro Castillo por «incapacidad» moral, en una trepidante jornada que incluyó el intento de disolución del Parlamento, la declaratoria de un estado de excepción y denuncias de rupturas al orden democrático.
Boluarte, quien hasta ahora ocupaba el cargo de vicepresidenta, tomó el lugar de quien fuera su compañero de fórmula durante las elecciones del 6 de junio de 2021. Sin el compromiso de una organización política tras su expulsión de Perú Libre, en enero de este año, la flamante mandataria hizo un llamado a la «más amplia unidad de todas y todos los peruanos».
Durante su juramentación, la abogada nacida en la ciudad de Chalhuanca, departamento de Apurímac, llamó a defender la soberanía nacional y «la independencia de las instituciones democráticas».
Pero Boluarte, de 62 años, no esperó a ser juramentada para mostrar su crítica al rompimiento del orden constitucional. Desde el momento en que Castillo anunció la disolución del Congreso, la entonces vicepresidenta rechazó el «golpe de Estado que agrava la crisis política e institucional».
Carrera en ascenso
Boluarte es abogada por la Universidad Particular San Martín de Porres, en donde cursó una maestría en Derecho Notarial y Registral. En 2015, fue nombrada jefa encargada de la Oficina Registral del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (RENIEC) en el distrito limeño de Surco. Posteriormente, asumió como primera vicepresidenta de los Clubes Departamentales de Perú.
Su acercamiento con Perú Libre inició en 2018, cuando el partido la eligió candidata a la alcaldía de Surquillo. Boluarte participó en las elecciones parlamentarias extraordinarias de 2020, las cuales fueron convocadas por el entonces presidente Martín Vizcarra tras disolver el Congreso. No obstante, la abogada no obtuvo un escaño.
En 2021, Perú Libre postuló a Castillo para la presidencia y a Boluarte como vicepresidenta. La fórmula obtuvo la victoria en segunda vuelta. Ya en el poder, el 29 de julio la abogada asumió el cargo de ministra de Desarrollo e Inclusión Social, un puesto que mantuvo hasta el pasado 25 de noviembre, cuando se hizo a un lado después de que Betssy Chávez asumiera como titular del Consejo de Ministros.
En los últimos meses, Boluarte libró un intento de censura en el Congreso por seguir ejerciendo como titular del consejo directivo del Club Departamental Apurímac, cuando ya era funcionaria pública.
Aún es una incógnita la dirección que tomará la presidencia de Boluarte, la abogada que reconoció que nunca abrazó el «ideario» de Perú Libre, lo que le terminaría costando la expulsión del partido de izquierda. «Lo que hemos dicho es que queremos un sistema universal de salud, queremos hacer de la educación una más cercana a la realidad peruana», admitió en una entrevista.