Las irregularidades en la concesión de certificaciones de ¥nacidos vivos¥ han sido confirmadas e investigadas en delegaciones de la Junta Central Electoral de varios hospitales de la región Este, donde haitianos, en complicidad con dominicanos, se dedican a esta práctica, como parte de un lucrativo negocio de suplantación de identidad.
Las anomalías, que ya se han convertido en una norma, han sido detectadas en varios centros de salud, incluidos el Hospital Materno Infantil Nuestra Señora de la Altagracia, de Higüey, y el Hospital Regional Doctor Antonio Musa, de San Pedro de Macorís, cuyos directivos confirmaron el hecho, aunque afirmaron que se tomaron acciones para frenarlas.
La venta de certificaciones de nacidos vivos es una práctica que ha beneficiado a empleados e intermediarios, como un negocio lucrativo, y como una ventaja de la que se aprovechan delincuentes, perseguidos y mafiosos internacionales.
A pesar de ser una práctica común, no ha sido enfrentada de forma contundente. Incluso, en Higüey, donde se comprobó que un empleado del Hospital Materno Infantil Nuestra Señora de la Altagracia vendía estos documentos desde hace un tiempo, los propios directivos conocían de la mala práctica, pero no saben si se aplicaron correctivos. El doctor Guillermo Hernández, director del Hospital Regional Doctor Antonio Musa, confirmó a Listín Diario que han ocurrido casos ocasionales y “está controlada” la práctica”, gracias a un procedimiento que sirve de colador a estas acciones.
Ha establecido, como medida de control, otorgar cédulas a las adolescentes que llegan embarazadas y estar vigilantes permanentemente para registrar los certificados de nacidos vivos de forma adecuada.
Los haitianos
La venta irregular ha sido denunciada por el doctor Jaime Rodríguez, director del Hospital Regional de la Altagracia en ocasiones anteriores, quien confirmó la obtención de documentos falsos, aunque dice que actualmente está bajo control.
Citó la práctica de haitianos que han declarado a sus hijos con documentos de otras personas. Ellos les facilitan las cédulas a otros compatriotas suyos por dinero.
Incluso, se conocen de casos de dominicanos que, relacionados con esta mafia, participan y adoptan haitianos y extranjeros como hijos, para facilitarle la obtención de documentos.
