China ordenó el miércoles el confinamiento de la zona que rodea a la principal planta del mayor proveedor de Apple, Foxconn Technology Group, en la ciudad de Zhengzhou debido a un brote de covid-19. Las autoridades locales decidieron implementar una «gestión estática» que implica la prohibición del tránsito de personas y vehículos por las calles del área, según un comunicado publicado en WeChat. La orden se prolongará 7 días, del 2 al 9 de noviembre.
La medida amenaza con interrumpir aún más las cadenas de suministro de la mayor fábrica de iPhone del mundo, que se estima produce el 80 % de los nuevos ‘smartphones’ de Apple, al cortar el flujo de trabajadores y componentes necesarios, señala Bloomberg.
Pese al brote, la planta sigue funcionando en modo ‘circuito cerrado’, limitando su contacto con el mundo exterior, cita Global Times un comunicado de Foxconn. Para mantener la producción, la planta ha implementado medidas como pruebas diarias de covid-19. Además, la empresa aumentará la actividad de sus otros centros para reducir el impacto del confinamiento.
Sin embargo, el funcionamiento de la fábrica depende del acceso a los componentes que son enviados allí. Según Bloomberg, la planta debería haber almacenado suficientes componentes para seguir operando durante algún tiempo, pero esto dependerá de la duración del confinamiento.
Por otra parte, después de que la empresa empezó a imponer medidas contra la propagación del covid, algunos de los 200.000 trabajadores comenzaron a abandonar la fábrica por las malas condiciones de trabajo. Videos aparecidos en redes sociales muestran supuestamente a personas saliendo de la planta.
«Se necesitan unos 10.000 trabajadores para cubrir el hueco», afirmó una fuente de Global Times en Foxconn, agregando que la contratación del nuevo personal comenzará en noviembre. Los nuevos empleados podrán trabajar en la planta de Zhengzhou o en otras fábricas de la empresa, dependiendo de las condiciones epidemiológicas.
En total, la situación podría provocar una caída del 30 % en la producción de nuevos iPhones en la fábrica de Zhengzhou, calcula Reuters citando una fuente anónima. Lo peor para la empresa es que este imprevisto se produce en una época, antes de la temporada de vacaciones de fin de año, en la que aumenta la demanda de dispositivos electrónicos.
