Brasil y Argentina anunciarán la siguiente semana el inicio del trabajo preparatorio sobre la creación de una moneda común, informa el diario británico Financial Times citando a funcionarios familiarizados con el asunto.
Las dos economías más grandes de Sudamérica discutirán el plan en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se celebrará en Buenos Aires el 24 de enero. El plan inicial se centrará en cómo una nueva moneda, que Brasil sugiere denominar ‘Sur’, podría impulsar el comercio regional y reducir la dependencia del dólar estadounidense, dijeron las fuentes.
De concretarse el proyecto, en un principio la nueva divisa circularía en paralelo con el real brasileño y el peso argentino. Además, se pretende invitar a otras naciones latinoamericanas a unirse a la moneda común.
«Habrá una decisión de comenzar a estudiar los parámetros necesarios para una moneda común, que incluye todo, desde cuestiones fiscales hasta el tamaño de la economía y el papel de los bancos centrales», adelantó el ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa.
«El primer paso de un largo camino»
«Sería un estudio de mecanismos de integración comercial«, agregó el ministro, señalando que no quiere «crear falsas expectativas» y que se trata del «primer paso de un largo camino que América Latina debe recorrer». Es probable que el proyecto tarde muchos años en materializarse. Massa recordó que la Unión Europea tardó 35 años en crear su divisa: el euro.
Según estimaciones de Financial Times, una unión monetaria que abarque toda América Latina representaría alrededor del 5 % del PIB mundial. La unión monetaria más grande del mundo, el euro, abarca alrededor del 14 % del PIB mundial en términos de dólares.
Se espera un anuncio oficial al respecto durante la visita del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva a Argentina que comienza este domingo. Brasilia y Buenos Aires han discutido una moneda común en los últimos años, pero las conversaciones fracasaron debido a la oposición del Banco Central de Brasil, comentó un funcionario cercano a las discusiones.