La cantante y múltiple ganadora del premio Grammy, Beyoncé, y la marca alemana de indumentaria y calzado deportivo, Adidas, han decidido concluir su alianza comercial.
Según dio a conocer este martes The Wall Street Journal, en base a declaraciones de allegados al caso, las partes acordaron tomar distancia al acuerdo comercial que habían firmado en 2018 debido a “importantes diferencias creativas”.
Dos años antes de su alianza con Adidas, la cantante había lanzado su marca Ivy Park en conjunto con Sir Philip Green, dueño de la compañía TopShop. Al cabo de un tiempo, las partes decidieron unificar la dirección, quedando el 100% de la empresa en manos de Beyoncé.
Fue entonces cuando la artista firmó un contrato con Adidas para la venta de sus prendas, así como para el desarrollo de nuevos productos.
En 2018, Adidas y Beyoncé firmaron un contrato para la venta de sus productos Ivy Park en las tiendas (REUTERS)
Sin embargo, tras casi cinco años de trabajo conjunto, las diferencias creativas con los directivos alemanes la habrían llevado a querer reivindicar su marca, trazar su propio camino y mantener la libertad creativa.
También, según difundió el medio estadounidense, las ventas de Ivy Park llevaban años por debajo de las expectativas del gigante alemán.
De todas formas, Adidas parecería estar en una mala racha dado que éste es el segundo punto final que pone a sus colaboraciones con estrellas de Hollywood.
Algunos meses atrás, la firma se vio envuelta en los escándalos protagonizados por el rapero Kanye West, quien sostuvo en múltiples ocasiones dichos racistas y antisemitas, que generaron polémica en todo el mundo.
En 2022, Adidas puso fin a su alianza con West por sus dichos antisemitas (Getty Images)
Ye -su nombre artístico- aseguró en una entrevista que George Floyd había muerto por consumo de drogas y no a raíz de la asfixia que le había provocado el oficial de la policía Derek Chauvin, quien hincó su rodilla sobre el cuello de la víctima durante más de nueve minutos, según confirmó la autopsia y la posterior sentencia judicial.
También, desfiló en el Paris Fashion Week con una remera en la que se leía el mensaje “White Lives Matter” (“Las vidas blancas importan”), en referencia al lema utilizado por supremacistas blancos en respuesta al movimiento que lucha contra el racismo, “Black Lives Matter”.
Estos episodios, sumado a su postura desafiante, llevaron a Adidas a cesar la producción de su línea de zapatillas, Yeezy.
La empresa difundió en un comunicado que “no tolera el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio” y calificó de “inaceptable, odiosa y peligrosa” la postura del rapero.
Esta ruptura no le fue barata a la marca que, de la noche a la mañana, se quedó con un stock de zapatillas estimado en USD 500 millones, las cuales no puede promocionar ni tampoco nadie quiere comprar.
Adidas quedó con un stock de zapatillas yeezy por USD 500 millones (Bloomberg)
Inclusive, la calificadora de riesgo Standard & Poor’s recortó sus calificaciones crediticias a corto y largo plazo para Adidas, considerando los efectos negativos de la ruptura en sus beneficios.
“Adidas se enfrenta a una multitud de retos empresariales, incluyendo la finalización de su asociación con Yeezy, las continuas presiones competitivas en el mercado chino y una contracción de la demanda de los consumidores en los países occidentales”, agregaron entonces desde S&P en un comunicado en el que enumeraron otras amenazas de la empresa.