Quien sea capaz de demostrar que posee las habilidades para ser cocinero, aunque lo haya aprendido en su casa, podría tener la oportunidad de obtener una certificación que le permitiría conseguir un empleo en un restaurante o un hotel si se aprueba el proyecto de Ley de Cualificaciones.
“Mucha gente domina u oficio; ebanistería, cocina y al no tener el título no consigue trabajo. Eso se corrige con la ley de cualificaciones”, expuso el ministro Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Ariel Jiménez, en una publicación en las redes sociales de la institución en la que convocaba al público a ver una transmisión en vivo a través de Instagram en la que hablaría sobre la iniciativa.
El jueves pasado Jiménez y la viceministra de Coordinación de Proyectos de Seguridad e Inversión de la Presidencia, Tania Guenen, se conectaron con más de cien seguidores y ofrecieron detalles del proyecto.
Reconocimiento
Guenen explicó que la Ley de Cualificaciones propone que las personas que hayan aprendido a desempeñar un oficio de forma empírica sean reconocidas y puedan conseguir trabajo.
“El marco te da la oportunidad de reconocer esas habilidades y esos conocimientos que tú adquiriste fuera de la educación formal y que puedas tener ese título o esa certificación para poder insertarte en el mercado laboral”, expuso Guenen.
El ministro destacó que en el país hay muchas personas que saben hacer muchas cosas y que si pueden demostrarlo a través de las entidades certificadoras que se tiene previsto crear podrán obtener un título que les servirá de aval ante los empleadores.
“Quien sepa cocinar, quien sepa pintura, ebanistería o quien sepa estadística… si puede demostrar que lo puede hacer no tiene que ir al aula. Ese será su aval, su carta de presentación de que tiene esas competencias”, explicó Jiménez.
Explicaron que el proyecto de ley contempla la habilitación de empresas que serían las encargadas de otorgar las certificaciones de acuerdo al nivel de conocimiento de los individuos.
“Se habilitarían entidades que puedan evaluar a las personas, que deben estar aprobadas por un organismo público, y eso le daría validez”, indicó el ministro.
Eso no significa que alguien podrá ir a solicitar un título de ingeniero u otra profesión sin ir a la universidad porque esto requiere educación superior. Las certificaciones se otorgarán conforme al nivel de preparación de cada quien de acuerdo a los criterios de evaluación establecidos, precisaron los funcionarios en la transmisión.
SEPA MÁS
Otros aspectos del proyecto
Convalidación
Los estudiantes que demuestren que dominan las competencias planteadas en determinado plan de estudio pueden exonerar asignaturas.
Competencias
Contempla que los alumnos reciban formación práctica, que adquieran conocimientos en habilidades (relacionadas con la personalidad), entre otras.
Avances
El proyecto de Ley de Cualificaciones fue enviado por el presidente Danilo Medina al Congreso Nacional el martes pasado.
La iniciativa es pionera en América Latina y recibe buena valoración
“Esa ley estaría bien porque eso (la certificación) es lo avala a uno para conseguir trabajo”, así opina sobre la iniciativa Joel González, un joven que lleva varios años desempeñándose como mecánico sin haber estudiado.
Con él coincide Medardo Amador, un profesional de psicología que reseña que desde siempre el conocimiento empírico ha sido importante en el ámbito científico.
El experto recordó que en la antigu¨edad esta era la única forma de obtener conocimiento, haciéndose aprendiz de alguien.
“Me parece excelente que se reconozca el conocimiento empírico. Hay personas que por una razón u otra no pueden acceder a una educación formal, pero sí aprenden un oficio de forma empírica. Así podrían obtener al menos un nivel técnico y algo que avale que saben lo que saben”, opina Amador.
Empresarios
Los líderes empresariales Circe Almánzar y César Dargam valoraron positivamente la iniciativa.
“Hay habilidades blandas y oficios que no requieren poseer un título y que tienen alta demanda en el mercado actual. Por el contrario, hay carreras tituladas que ya están saturadas”, expuso Dargam.
Almánzar indicó que el proyecto es importante e hizo énfasis en que si se aprueba se debe dar seguimiento y fiscalizar para comprobar que las personas que reciban las certificaciones realmente reúnen las condiciones y están aptas para bridar un servicio profesional.
