Contra el azúcar, un plan más ambicioso.
La Organización Mundial de la Salud recomendó recientemente que las personas traten de que sólo el 5% de su ingesta diaria de calorías proceda de productos dulces.
Ahora algunos expertos se han mostrado más radicales y han aconsejado que se reduzca a un 3% o menos.
Pero es más fácil decirlo que hacerlo.
Philip James, nutricionista de la Escuela de Londres de Higiene y Medicina Tropical, y uno de los expertos que han hecho la recomendación, dijo que para lograr reducir la ingesta a menos de un 3% ayudaría que se eliminaran las máquinas expendedoras que ofrecen dulces y bebidas azucaradas en escuelas y hospitales, por ejemplo.
También recomentó que los alimentos que tienen un contenido de azúcar superior al 2,5% sean etiquetados con una advertencia y se les imponga un impuesto por azúcar para reducir el consumo.
Pero, ¿qué podría hacer el consumidor para reducir la cantidad de azucar que ingiere al día?
BBC Mundo te propone cinco maneras para lograrlo.
Evita las bebidas azucaradas
Lo primero sería evitar refrescos y otras bebidas altas en calorías.
Algunas latas de soda de 330ml llegan a tener 35g de azúcar.
Además, según nutricionistas, no se disfrutan como los alimentos sólidos que poseen azúcar ni sacian de igual manera que éstos últimos.
Elabora tus propios dulces
En los alimentos elaborados industrialmente, además de los azúcares añadidos puede haber otros aditivos con azúcar o sustitutos que también poseen hidratos simples.
Por lo tanto es preferible hacer dulces caseros para poder regular la cantidad de azúcar que se utiliza.
A la hora de elaborar pasteles se puede sustituir el azucar por puré de frutas que ofrecerán su fructosa natural y además, darán textura, humedad y ofrecerán nutrientes saludables a la receta.
Otra opción es reducir a la mitad la cantidad de azúcar y resaltar el sabor con un poco de edulcorantes sin calorías.
No utilice azúcar si no es necesario
Por ejemplo, si se consumen cereales con leche, generalmente los cereales ya poseen azúcar. Algunos de ellos contienen hasta 37% de azucar.
Por ello es mejor no añadir más a la mezcla o sustituir los más azucarados por otros simples como la avena, según recomendaciones del sistema de salud público británico.
Haciendo esto puede reducir la ingesta de azúcar en 70g en una semana.
Lo mismo se puede hacer con el yogur o con un puré de frutas que no necesitan más azúcar, de lo contrario, se esconde su sabor natural.
También se pueden emplear edulcorantes artificiales sin calorías si su paladar dulce se lo pide.
Evite la comida precocinada y condimentos y salsas
Estos alimentos generalmente son altos en azúcar y tentadores.
Un tercio de un frasco de tamaño medio de salsa para pasta (aproximadamente 150g) puede contener más de 13g de azúcar, el equivalente a tres cucharaditas de azúcar.
Los condimentos y salsas, como la salsa de tomate pueden tener hasta 23g de azúcar en 100g. Estos alimentos se sirven generalmente en pequeñas cantidades, pero si se comen todos los días, el recuento de azúcar pueden sumar.