El juicio por drogas de la estrella del baloncesto estadounidense Brittney Griner en un tribunal ruso se enfocó el martes en declaraciones de que el consumo de cannabis, ilegal en Rusia, está permitido por razones medicinales en otros países.
Griner ha admitido que llevaba botes de vaporizador que contenían aceite de cannabis cuando la arrestaron en febrero en un aeropuerto de Moscú, pero dice que no tenía intenciones delictivas y que los botes estaban en su equipaje por error, dada la prisa con que empacó.
“No alegamos que Brittney los trajo como medicamento. Decimos que los regresaron voluntariamente porque estaba apurada”, dijo el abogado defensor Alexander Boykov después de la sesión en la que un neuropsicólogo ruso declaró sobre el consumo del cannabis medicinal en el mundo.
“El público ruso debe saber, y ante todo el tribunal ruso debe saber, que no se consumió con multas recreativas en Estados Unidos. Lo recibió un médico”, dijo.
Griner, bicampeona olímpica que juega en el Phoenix Mercury de la WNBA, puede ser condenada a un máximo de 10 años de prisión si la declaran culpable. La declaración del médico y su confesión de que tenía los botes apuntan a conseguirle una condena leve.
“Tenemos muchos factores mitigantes. Esperamos que el tribunal los tenga en cuenta. Y las cortes en Rusia tienen un margen muy amplio con respecto a la sentencia”, dijo Maria Blagovolina, del equipo de abogados de Griner.
El juicio comenzó el 1 de julio y hasta el presente se han realizado cinco audiencias, algunas de las cuales duraron apenas una hora.
La lentitud del juicio y los cinco meses que lleva Griner en la cárcel han provocado fuertes críticas de sus compañeras de equipo. Estados Unidos ha declarado formalmente que ha sido “detenido injustamente”, algo que las autoridades rusas rechazan enérgicamente.
Elizabeth Rood, la encargada de negocios de la embajada estadounidense, asistió a la audiencia del martes. Griner “confirma que se encuentra y bien y lo mejor posible bajo las circunstancias”, dijo a la prensa.