El Senado aprobó en primera lectura el jueves un proyecto de ley que promete revolucionar la manera en que opera la industria de formación y desarrollo de jóvenes que aspiran a ser peloteros en el sistema de las Grandes Ligas.
La ley que regula la práctica de béisbol establece que un niño no podrá ingresar a una academia antes de los 15 años, obliga a los padres a enviar a los niños a la escuela mientras practican y a las organizaciones de la MLB a continuarlo una vez firmen.
La pieza, sometida por Santiago Zorrilla (PRM-El Seibo), también exige a los programas independientes a regularizarse ante el Ministerio de Deportes y contempla amonestaciones de hasta RD$1.5 millones para los entrenadores cuyos prospectos arrojen positivo a sustancias prohibidas.
Pero el punto más neurálgico del proyecto son los artículos siete, ocho, nueve y diez, donde se establece que a la hora de firmar el prospecto y los padres de este tendrán que crear un fideicomiso con el 40% del bono de firma. Es una inversión que el joven podrá liquidar una vez alcance la mayoría de edad.
Junior Noboa, comisionado Nacional de Béisbol, aplaude la iniciativa legislativa, pero entiende que el monto es alto y favorece que sea reducido a la mitad, ya que a la hora de firmar los jóvenes tienen una serie de compromisos por cumplir a la familia y quedarían con poco espacio.
En la industria de desarrollo de talentos los prospectos suelen comprometer entre el 30 y 50% del bono de firma con los entrenadores. Si tuvieran que dejar el 40% entonces quedarían solo con entre el 30 y 10% a la hora de firmar, siempre y cuando el Congreso apruebe esta ley.
Se trata de una industria que generó inversión por US$82.3 millones en el reclutamiento de 410 dominicanos en 2021. Un joven como Roderick Arias, que firmó por un bono de US$4 millones de los Yanquis en enero pasado, tendría que dejar US$1.4 MM que podría tocar en 2023.
Sin embargo, el bono promedio por el que se firmó en el último año fiscal alcanzó los US$200,000 por primera vez y solo 24 jugadores recibieron pagos de siete dígitos.
Dicho esto, un prospecto que firmara por la media podría recibir a la hora de ser autorizado su pago US$40,000 en caso de dejar el 40% al entrenador e igual cantidad al fideicomiso.
“Lo del fideicomiso lo mantengo en un 20% porque los muchachos tienen altos compromisos cuando ellos firman y por lo menos en un 20% para que no tengan inconvenientes y puedan cumplir compromisos que hacen con sus familiares. Esa es una realidad”, dijo Noboa, quien desde 1996 es el jefe de cazatalentos de los Arizona Diamondbacks en América Latina.
El fideicomiso deberá ser abierto a nombre del padre, madre o tutor del jugador.
El artículo 37 establece que ante una actuación inadecuada de la administración de los bienes del menor por el padre, madre o tutor el jugador podrá apelar al Código para la Protección de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes con las sanciones que establece para esos casos.
El artículo 36 contempla sanciones para el padre o tutor que no acate el cumplimiento de la creación del fideicomiso. Se aplicarán multas de entre seis y 10 salarios mínimos, así como por las penas establecidas en el Código Penal por abuso de confianza, que estipulan prisión de entre seis meses y dos años.
Entrenadores
La ley contempla que para ser entrenador de béisbol con la licencia que otorgará el Miderec (imprescindible para operar y trabajar en academias) la persona no podrá haber sido condenada por la justicia por actos como agresión sexual, violación, abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes o prostitución de menores.
Tampoco por trata y tráfico de personas, explotación sexual comercial con menores o pornografía.
Si se comprueba que una persona en la academia suministró alguna sustancia prohibida a los menores estará expuesto a sanciones que conlleven multas de entre 75 y 150 salarios mínimos. La reincidencia conllevaría el retiro de la acreditación y el doble de las multas.
Sin embargo, si existiera la prescripción de algún médico para el uso de la sustancia el entrenador no sería amonestado.
Para adquirir el gafete de entrenador no podrá tener antecedentes penales. La pieza otorga a Miderec la introducción de cualquier otro requisito.