Kourtney Kardashian y Travis Barker se casaron este domingo por tercera vez, ahora en el Castello Brown, en Portofino, Italia.
“Felices para siempre”, escribió en su Instagram la mayor del clan Kardashian luego de que en abril contrajera nupcias en Las Vegas con el baterista y hacerlo oficial ante un juez hace una semana en California.
La novia llegó ante el sacerdote con un vestido corto de encaje blanco, cubierto con un largo velo de encaje negro que tenía la imagen de una virgen bordada.
Barker vistió un elegante traje negro. Los dos lucieron piezas de Dolce & Gabbana.
La ‘momanager’, Kris Jenner, se mostró emocionada al entregar en el altar a su hija.
El castillo de la boda una vez fue utilizado como punto de descanso para la figura histórica de Richard the Lionhear, en su camino a las Cruzadas.
El Castello Brown normalmente funciona como museo para turistas, pero todo el edificio en la cima de una colina, con vista al histórico pueblo costero cerca de Génova, fue cerrado desde el miércoles pasado, después de que las Kardashian lo alquilaran por una semana.
El escenario principal de la gala nupcial se levantó en los terrenos de una casa histórica junto a la playa cerca de la fortaleza Castello Brown.
Se habló de una estructura de oro de casi cuatro metros de altura en forma de un enorme marco dorado o espejo, esto en un extremo del jardín debajo de la casa.
Gran parte de la familia Kardashian se hospeda en una casa al lado del castillo medieval.
A la boda también asistirían el hijo de Kardashian, Mason, de 12 años, Penélope, de 9 años, y su hijastro, Landon de 18. El baterista es el padre de Alabama, de 16 años, y su hijastra Atiana, de 23 años. Las chicas sirvieron como damas de honor.
En la ceremonia tampoco faltaron KimKardashian y su hija North West.
Fue el pasado mes de octubre cuando la pareja se comprometió a través de una espectacular pedida de mano que tuvo lugar en la costa de Montecito (California).
Con la arena cubierta de velas y rosas rojas haciendo la forma de un enorme corazón, el artista de 46 años comenzó a cantar y se arrodilló para preguntar a su novia si quería casarse con él y entregarle un impresionante anillo con un diamante ovalado.