La defensa de Ángel Rondón, imputado por los sobornos en el caso Odebrecht, planteó ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que el Ministerio Público creó “un villano favorito”, sin pruebas que justifiquen una sentencia condenatoria en su contra.
Emely Peguero, José Miguel Minier y Fernand Ramos, hablaron en el cierre de presentación de pruebas, insistiendo en que sus pruebas a descargo son “completas y suficientes” para absolver a su cliente.
“Nuestras pruebas no han sido contradichas por el Ministerio Público ni en instrucción, ni en juicio de fondo”, alegaron. “Toda la prueba a descargo aportada es suficiente y creíble”, afirmó Emely Peguero ante las juezas Gisell Méndez, Tanía Yunes y Jisell Naranjo.
Sostuvo que los fiscales de la Pepca, a quienes calificó de “bárbaros”, investigando y haciendo acusación, “crearon un villano favorito sin tener un solo ápice de pruebas que pueda justificar una condena de 10 años de prisión, como ha solicitado al tribunal el ente acusador.
Indicó que tras ser llamado a interrogatorio, Rondón entregó al Ministerio Público, el 16 de enero de 2017, los documentos a descargo en un plazo de 72 horas, “pero fueron enlistados y cotejados y utilizados en su contra”.
El expediente.
El Ministerio Público ha establecido que Ángel Rondón Rijo constituyó un entramado societario conformado por varias empresas que sirvieron para lavar dinero ilícito, y se valió de sus vínculos políticos y sociales para la obtención de obras a beneficio de Odebrecht.