La Procuraduría General de la República (PGR) ha informado en varias ocasiones que ha retomado decenas de investigaciones que no fueron concluidas por la gestión anterior de esa institución, y ha citado diferentes casos, sin referirse a la presunta fuga de Pedro Alejandro Castillo Paniagua, mejor conocido como “Quirinito”.
El caso comenzó a ser investigado durante la gestión de Jean Alain Rodríguez, y lideraba las pesquisas el entonces inspector general del Ministerio Público, Bolívar Sánchez. Llegaron a interrogar a familiares, personal penitenciario, médicos y a la esposa del condenado, pero no lograron resolver el caso.
A principios de octubre del 2017, la Procuraduría informó que durante el proceso de investigación que desarrollaba en torno a la presunta muerte de “Quirinito”, logró recabar suficientes evidencias para establecer que ese condenado a 30 años por homicidio, vinculado al tráfico de drogas, se encuentra vivo y prófugo.
A partir de estos hallazgos, las autoridades activaron una infructífera búsqueda, llegando a solicitar a los organismos de inteligencia del país, así como a la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) una orden de captura internacional contra Castillo Paniagua.
El organismo también expresó que suspendió al médico legista Orlando Herrera Robles, quien el 5 de julio de 2017 emitió el certificado de muerte de “Quirinito” en base al cual se expidió el acta de defunción No. 00239, Folio 0039, con fecha de registro del 6 de julio de ese año, mediante el cual se declaraba la defunción del “prófugo” por un infarto agudo al miocardio, luego de sufrir de un cáncer de lengua.
Según las autoridades, al momento de fingir su muerte para fugarse, “Quirinito” se encontraba “cumpliendo prisión domiciliaria, luego de que la jueza Aleida Jiménez Acosta, que ordenó (sentencia número 136-01-2017-SSEN-00064) sacarlo del Centro de Corrección y Rehabilitación Vista al Valle para recluirlo en una vivienda situada en el residencial Bety Marie, del sector Paseo de los Ríos, en el municipio cabecera de la provincia Duarte”.
Durante la investigación fue suspendida tanto la magistrada Aleyda Del Carmen Jiménez Acosta, jueza de Ejecución de la Pena del Departamento Judicial de San Francisco de Macorís, así como el juez Willys De Jesús Núñez Mejía, de Ejecución de la Pena del Departamento Judicial de San Cristóbal, pero en julio del 2020 fueron restituidos en sus puestos por el Consejo del Poder Judicial.
En el transcurso de la investigación la Procuraduría interrogó a “decenas” de personas y supuestamente obtuvieron documentos en instituciones públicas y privadas.
En uno de los interrogatorios, el padre de Castillo Paniagua, el señor Rafael Castillo Ramírez, dijo “que su hijo no está muerto porque de haber fallecido le hubiesen entregado el cadáver”.
Mientras que la esposa de “Quirinito”, Jennifer Esthefani Domínguez de Castillo, declaró “que su esposo murió en su residencia, en horas de la mañana del 5 de julio del 2017, y que “no estaba en disposición de decirle a las autoridades quién se llevó el cadáver ni dónde está enterrado”.
En otras ocasiones, esta mujer declaró a la prensa que el cuerpo había sido cremado.
