Un equipo de investigadores del Instituto Max Planck de Sistemas Inteligentes y ETH Zürich han creado el muñeco robot HuggieBot 2.0, diseñado para abrazar cuando se necesite y pensado para aquellas personas que por cuestiones de soledad o de pandemia no reciban el abrazo que tanto se merecen.
«Sentimos que un robot abrazador debe ser suave, cálido, del tamaño de un humano, percibir visualmente a su usuario, ajustar su abrazo al tamaño y la posición del usuario y soltarlo de manera confiable cuando se quiera terminar el abrazo», declaran sus responsables.
El robot cuenta con un torso inflable y suave que puede sentir el contacto de un humano, un par de brazos robóticos que se acompañan de unas almohadillas térmicas por todo el cuerpo del robot, para hacerlo consistente y manoplas acolchadas que consiguen cerrar completamente el abrazo.
Sus responsables afirman que hace uso de los sensores en los brazos para detectar cuándo el usuario desea dejar el abrazo. También cuenta con un sensor en el torso para detectar cuando un usuario ha quitado sus brazos de la espalda, indicando así su deseo también de terminar el abrazo. Esto hace que sea natural e intuitivo y que no te atrape en su abrazo cuando quieras desprenderte.