El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este miércoles con una subida del 1,2 %, hasta los 39,74 dólares el barril, motivada por un descenso en los inventarios de crudo de Estados Unidos, que prueba cierta recuperación en la demanda de combustible, y por los datos positivos de la industria manufacturera china, el mayor consumidor de petróleo del mundo.
A las 09.15 hora local (13.15 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en agosto sumaron 47 centavos respecto a la sesión previa del martes.
Los precios del petróleo subían en la jornada posterior a la publicación de las estadísticas del Instituto Estadounidense del Petróleo (API en inglés), que muestran una bajada en los inventarios de Estados Unidos superior a los 8,2 millones de barriles para la semana del 26 de junio, si bien las reservas de destilados parecen haber experimentado una subida.
Los datos oficiales los publicará la Administración de Información Energética (EIA en inglés), que depende del gobierno federal, a lo largo de la mañana.
El buen ritmo de las reaperturas económicas alrededor del mundo, especialmente en Asia, también ha contribuido al alza de los precios del crudo.
«Si los datos oficiales de la EIA lo confirman, la disminución considerable de las existencias de petróleo estadounidense probablemente se debió a un aumento de la actividad en las refinerías. Las transferencias a la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR) también contribuyeron a la disminución semanal», apuntó la analista Louise Dickson, de la consultora Rystad Energy.
Por otro lado, también ha influido la caída en la producción de los estados miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+), que en junio han bombeado 1,92 millones de barriles por día (bpd) menos con respecto a mayo.
Para los analistas, este dato demuestra que los países que han tenido dificultades en cumplir con el histórico ajuste de 9,7 millones de bpd han logrado articular los mecanismos necesarios para compensar sus niveles de cumplimiento.
