SANTO DOMINGO.-El destacado historiador Manuel Núñez afirmó que el empleo de soldados privados en Haití era inevitable y la única salida posible al conflicto en ese país, ya que no hay una fuerza nacional que pueda contrarrestar el poder de las 200 bandas que dominan el 80% del territorio.
Núñez dijo que la comunidad internacional no quería comprometerse, ningún país asumía la responsabilidad directa de los hechos y por eso se recurrió a Kenia.
Destacó que fueron diecisiete años con la Misión de la Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH) y que en el vecino país no se produjo ningún resultado apreciable.
Manifestó que en esta ocasión ¨Son soldados que tienen un carácter mercenario, no están actuando en nombre de Gobierno, sino de una contratación hecha en el sentido de buen postor y no puramente de una misión de solidaridad¨.
Explicó que la única manera de poder hacerle frente a esas bandas es a través de una fuerza disuasoria y que se ha dicho que será una fuerza de dos mil 600 hombres, no policías, sino fuerzas especiales que han hecho misiones similares en África.
“Serán disuasorias porque lo que se espera en Haití es que, ante el avance de esas fuerzas si están bien dotadas de un buen poder de fuego, se produzca una disuasión por parte de la mayoría de las bandas, se proceda al desarme y a la instalación de un gobierno legítimo que detenga el monopolio de la violencia como debe ser en cualquier tipo de Estado”, manifestó Núñez.
Al preguntarle qué piensa de la forma en que el Gobierno provisional de Haití decidió organizarse, dijo que la situación en ese país es delicada y es una misión que debe durar hasta el 7 de febrero del 2026, es decir dos años.
Consideró que someter una presidencia rotatoria le daría un problema adicional a Haití porque introduce un elemento perturbador en las políticas que se pongan en práctica.
En cuanto a las decisiones de ser por mayoría de cuatro y no por consenso, le parece mucho más plausible la decisión, pero no cree que, con una presidencia rotatoria, que involucra una situación de inestabilidad permanente, se pueda lograr algo.
¨Creo que es preferible que el liderazgo lo ejerza quien tenga las cualidades y que sea permanente con una línea política que añada todas las modificaciones que deban añadirse¨, agregó.