- Pasa balance a los sectores propulsores del comportamiento del PIB
El economista Haivanjoe NG Cortiñas, manifestó que la incertidumbre política, promovida por los aprestos de modificación constitucional con tensiones en el partido de gobierno, le imprimió lentitud al crecimiento económico durante el año 2019 que finaliza, al mostrar una tasa de expansión del producto interno bruto (PIB) cercano a un 5.0 %, pero un 2.0 % menos que en 2018, cuando creció en un 7.0 %.
Indicó que el crecimiento del PIB dominicano de 2019 presenta pocas luces, porque sectores claves en la generación de empleos y divisas mostraron en algunos casos enlentecimiento, al comparar el 2019 con 2018, como la Construcción que pasó de un 11.5 % a un 8.5 %, la Manufactura local por igual de un 6.2 % a un 2.6 %, la Agropecuaria de un 6.1 % a un 4.2 %, el Comercio de un 8.5 % a un 3.4 %, los Hoteles, Bares y Restaurantes de un 5.6 % a un 1.0 % y otros no crecieron, como la Manufactura de Zona Franca de un 10.1 % a un -0.2% y Comunicaciones de un 11.1 % a un -5.8 %.
Amplió que los sectores propulsores del referido comportamiento del PIB fueron los Servicios Financieros con un 8.8 %, la Construcción con un 8.5 % y Energía y Agua con un 7.9 %.
NG Cortiñas apuntó que la cartera de crédito del sistema financiero –monetizador de la economía- también se enlenteció, al estar creciendo sobre el 10.0 % en 2019, cuando en 2018 fue de un 13.0 %. El coeficiente de monetización del crédito de la banca dominicana a septiembre ronda el 26.1 %, similar a la de años anteriores.
Agregó el economista que la tasa de inflación se incrementó en el 2019, al terminar situándose próximo a un 4.0 %, resultado que sería superior al del año 2018, cuando fue de un 1.7 %, aunque reconoció que el incremento de los precios estuvo dentro de la meta de inflación del año que concluye.
El aumento de los precios afectó más a los sectores de menos ingresos, al crecer sobre el 5.0 % el costo de la canasta básica del quintil número 1, lo que significa que la inflación de los pobres fue mayor que la de la población de mayores ingresos, al situarse esta última en alrededor de un 3.0 % y en adición, la variación de los precios para el renglón alimentos y bebidas no alcohólicas creció en un 7.34 %, otra señal de que la inflación ha afectado más a los pobres, conforme a los datos de noviembre, sostuvo NG Cortiñas.
Por el lado bancario, la tasa de interés activa nominal promedio ponderado, estaría concluyendo en el 2019 en un nivel de aproximadamente un 13.68 %, superior en un 1.22 % al promedio de 2018, que fue de 12.46 %; el nivel registrado por la tasa de interés bancaria, aconteció pese a que la Tasa de Política Monetaria del Banco Central se redujo un 100 puntos básicos, a partir de inicio del segundo semestre del año en curso, enfatizó Haivanjoe NG.
El economista agregó respecto al tipo de cambio, que la depreciación del peso dominicano terminará rondando el 5.2 % en 2019, superior en un 1.2 % respecto a la pérdida de valor cambiario en 2018, cuando fue de un 4.0 % y también mayor que la depreciación estimada en el presupuesto nacional que es de un 4.0 %.
NG Cortiñas apreció como punto luminoso, el comportamiento de las Reservas Internacionales Neta (RIN), que en 2019 terminarán en un nivel que rondaría los US$ 7,145.6 millones, monto superior en US$ 458.3 millones respecto al 2018 de igual mes, una señal de fortalecimiento a favor de su contribución a la estabilidad del tipo de cambio y de otros compromisos internacionales de la economía dominicana.
Al evaluar la Base Monetaria Restringida (BMR), el economista consideró que la oferta de dinero ha sido menor que la programada, al registrar un monto de RD$ 232,118 millones a octubre, cuando ha podido ser de hasta RD$ 257,862 millones, lo que equivale a una disminución del orden de los RD$ 25,744 millones, para un crecimiento interanual de un 7.7 %, mientras el previsto es de un 8.1 % para el 2019. La holgura registrada de la BMR, podría ser una decisión deliberada para que los billetes y monedas en circulación no ejerzan más presiones de origen monetarias a la inflación, en razón de que se encuentra cercana a la meta. Mientras, el público se ha quejado por la falta de circulante.
En cuanto a las remesas familiares, estas a octubre de 2019 alcanzan los US$ 5,867.5 millones, monto mayor al registrado al mismo mes de 2018, que fue de US$ 5,392 millones, lo que permitiría estimar que las remesas al cierre del año estarían rondando los US$ 7 mil millones, favoreciendo el nivel de la RIN y también, al soporte de las importaciones que realiza la economía dominicana, señaló NG Cortiñas.
El economista mostró como otra sombra de la economía de 2019, a la deuda del sector público no financiero, dado que estaría cerrando el año con un nivel de alrededor del 39.0 % del PIB, equivalente a un monto de US$ 34,058 millones, cuando a diciembre de 2018 era de US$ 32,158 millones, para una presión del PIB del 37.6 %, significando aumentos en valores absolutos y relativos de US$ 1,900 millones y de alrededor de un 1.4 % del PIB; así como además la continuación del aumento del endeudamiento.
Al examinar el balance fiscal, el economista lo consideró como un punto débil adicional, al apreciar que el déficit fiscal podría cerrar en un 2.2 % del PIB, cuando el estimado en el presupuesto de 2019 es de un 1.7 %, también del PIB. Recordó que el gobierno tuvo que agenciar por ante el Congreso Nacional, que le aprobara un presupuesto complementario, ante la caída de los ingresos y aumento del gasto, ambos por un monto de RD$ 22,644 millones, equivalente a un 0.5 % del PIB y a la autorización de nuevas fuentes de financiamiento.
De manera, que la economía dominicana de 2019, se despide con más inflación, más depreciación, más deuda, más déficit fiscal, mayor tasa de interés bancaria, menos crecimiento económico, menos aumento en la cartera de crédito y menos dinero circulando que el programado, enfatizó el economista.
Haivanjoe NG Cortiñas, al concluir la evaluación al desempeño económico de 2019, indicó que el balance permite despedir el año con metas logradas, pero con resultados enlentecidos y desmejorados, respecto al 2018 y un estado situacional de la economía que aumenta los desafíos para el próximo año 2020, en un entorno menos favorable para los manejadores de la política económica, en ocasión de la celebración de las elecciones presidenciales de mayo que podrían crear incertidumbre política.
Fuente: Diario Libre