SANTO DOMINGO. -La familia del fenecido periodista Orlando Martínez Howley responsabilizó hoy al Ministerio Público de que el general retirado Salvador Lluberes Montas (Chinino) muriera sin que se le hiciera justicia por el asesinato su de pariente, ocurrido el 17 de marzo de 1975.
José Parra Báez, abogado de Sergio y Nixon Martínez Howley, hermanos del periodista Martínez, dijo que Chinino, principal acusado del hecho, murió “premiado” por el Poder Judicial en vista de que nunca se le hizo justicia.
Chinino, muerto ayer de un infarto cardíaco en su residencia de Casa de Campo, La Romana, figuraba como el acusado principal del asesinato del periodista Martínez.
Se encontraba en libertad desde 1998, luego que la Novena Sala Penal del Distrito Nacional ordenara el desglose del expediente en la parte que concernía a él por razones de salud.
Sin embargo, nunca se hizo un reporte médico sobre la evolución de su salud, lo que al entender del abogado Parra Báez, constituyó una patente de corso para que viviera hasta ayer fuera del alcance del brazo ejecutor de la justicia.
Recordó que la razón por la cual Lluberes Montás fue desglosado del expediente sobre el asesinato del periodista Martínez fue porque llevaron a la audiencia en 1998 un legajo de documentos que supuestamente demostraban el deterioro de su estado de salud, sin que eso documentos no fueran corroborados por una junta médica, ni por estudios forenses.
Cuestionó que el Ministerio Público nunca se preocupara por darle seguimiento a la evolución de su estado de salud, y que nunca volviera a presentar su caso.
El caso del asesinato del periodista Martínez fue investigado e instruido por el entonces juez de instrucción Juan Castillo Pantaleón, quien dijo hoy que, sin lugar a dudas y fuera de discusión, la orden de darle una golpiza al periodista Orlando Martínez la dio Lluberes Montás (Chinino).
“Él pudo argumentar lo que quiso durante el resto de su vida y negar que no dio la orden; en eso duro muchísimos años, dizque muriéndose, pero bebiendo whisky”, expresó Castillo Pantaleón refiriéndose a Lluberes Montás.
Los coacusados por el asesinato de Orlando, el 17 de marzo de 1975, son el fenecido general retirado Joaquín Antonio Pou Castro, Rafael Alfredo Lluberes Ricart (Lluberito), el ex cabo Mariano Cabrera Durán y Luis Emilio de la Rosa Beras.
Fueron condenados en primera instancia a 30 años de prisión por la entonces juez de la Séptima Cámara Penal, Katia Miguelina Jiménez, pero una sentencia del 25 de julio de 2003 de la Segunda Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de Santo Domingo, anuló en todas sus partes la sentencia de Jiménez alegando violación al derecho procesal de los prevenidos.
Posteriormente la Corte de Apelación inició desde cero el proceso y redujo las penas impuestas a los acusados.
Finalmente, el 18 de diciembre de 2007, la Suprema Corte de Justicia concluyó con el conocimiento del caso, condenando a 30 años de cárcel a Pou Castro, tras declararlo responsable de la muerte del periodista Martínez Howley, en vez de cómplice como lo había calificado una sentencia que le había impuesto 20 años. En torno al caso, la Corte de Apelación también condenó a Mariano Cabrera Durán y Rafael Alfredo Lluberes Ricart, a 30 años de prisión, confirmando la sentencia original emitida por la Décima Sala Penal del Distrito Nacional, en agosto de 2000.
